Te presentamos todos los factores que debes tener en consideración antes de cambiar de smartphone, a fin de no caer en una decisión acelerada o un gasto innecesario.
No es un secreto que el smartphone juega un papel clave en la dinámica de la sociedad moderna. El móvil se convirtió en un elemento fundamental para el trabajo, la vida académica, las relaciones sociales y hasta el entretenimiento. Desde hace varios años, dejó de ser privilegio de algunos para convertirse en una necesidad para las masas.
Sin embargo, la industria del smartphone no está exenta de un problema que azota a otros sectores: el consumismo desenfrenado. Se ha vuelto normal ver numerosos lanzamientos de móviles que se adaptan a diferentes perfiles y que incluyen nuevas características, así como el refinamiento de las tecnologías ya existentes. Prácticamente, las marcas estrenan nuevas ediciones de sus modelos cada año, como sucede con la serie Galaxy S de Samsung, el iPhone de Apple o la línea P de Huawei.
Una decisión racional, no emocional
En primer lugar, el lanzamiento de nuevos modelos y versiones al mercado responde a una estrategia comercial de los fabricantes y no a la necesidad de los consumidores. Como sucede en otras industrias, las marcas generan la sensación de que es necesario cambiar de smartphone, debido a que los que tienen cierto tiempo en el mercado están cerca de quedar obsoletos.
Si a ello le sumamos que la mayoría de las compañías dan soporte con actualizaciones hasta 2 o 3 generaciones atrás, se reafirma este enfoque orientado a no bajar el volumen de ventas. Como resultado, muchos tienen la extraña necesidad de comprar el modelo más reciente con la última versión del sistema operativo instalada de fábrica, incluso aunque el rendimiento de su teléfono todavía sea correcto.
La clave para saber cuándo cambiar de smartphone es convertir esta decisión emocional en una racional, valorando diversos factores. A continuación, te presentamos una serie de aspectos que debes considerar antes de desechar tu móvil actual, a fin de tomar una decisión inteligente para tu bolsillo sin sacrificar la experiencia de uso.
Factores a considerar antes de cambiar de smartphone
De acuerdo con los expertos, quienes han analizado la parte técnica a profundidad, un smartphone debe durarte un periodo de 3 años como mínimo. Dentro de este lapso, podrías considerar otras opciones antes de deshacerte de tu móvil. Entre ellas, se encuentra la reparación o el cambio de una pieza de hardware para exprimir su tiempo de vida útil.
Por ejemplo, existen tiendas de repuestos para iPhone X o el iPhone 8, así como para equipos de Samsung, Huawei, Xiaomi, Sony y otros fabricantes, donde podrías encontrar la mejor inversión. Un error común es querer cambiar de teléfono por una falla que consideramos “irreparable”. Mientras que algunas de ellas solo son errores de hardware, otros móviles quedan “como nuevos” con solo reemplazar un componente. Si tu smartphone tiene menos de 3 años, es una alternativa que debes considerar como mínimo.
En caso de que la reparación sea demasiado costosa, entonces tendrás un motivo totalmente válido para considerar la compra de otro móvil. Asimismo, no conviene invertir una suma considerable en la reparación si hay fallos o desgaste en varios elementos del equipo. Esto incluye el deterioro estético del móvil, así como problemas severos con la batería, la pantalla, la cámara o el procesador, entre otros.
Cabe mencionar que el tema del soporte tampoco debe quedar fuera de nuestro análisis. El lanzamiento de nuevas versiones de los sistemas operativos y capas de personalización no solo representa la renovación estética de la interfaz. Las actualizaciones también ofrecen un mejor blindaje y resuelven brechas de seguridad.
El reto consiste en deshacernos de la idea de que debemos cambiar de smartphone cada año únicamente por el deseo de tener el último modelo. No solo tomaremos una decisión que beneficie nuestra economía sin afectar la experiencia de uso, sino que también actuaremos con responsabilidad ambiental.