Mark Russell lanzó comentarios que le restaron importancia a la Nikola Badger dentro del plan de negocios de la compañía.
El CEO de Nikola, Mark Russell, cometió un error que golpeó la cotización de la compañía en la bolsa. En una entrevista para Financial Times, le restó importancia al papel que juega la Nikola Badger dentro de su plan de negocios, dejando claro que la apuesta de la marca se inclina hacia el hidrógeno. Lamentablemente, sus comentarios no fueron bien recibidos por el mercado y ocasionó un desplome del valor de la firma.
Las declaraciones del director ejecutivo le restaron protagonismo a la pick-up eléctrica de Nikola. Cabe recordar que sobre este futuro modelo se habían forjado expectativas importantes, incluso plantándose como una de las rivales más fuertes que tendría la Tesla Cybertruck y la Rivian R1T.
“La Nikola Badger fue un proyecto interesante y emocionante para algunos accionistas, pero nuestros accionistas institucionales se central principalmente en el plan de negocios (…) Nuestro plan, desde antes de que se cotizara en la bolsa, siempre se centro en los camiones pesados y la infraestructura de hidrógeno”, señaló.
La reacción de la bolsa
Las declaraciones controversiales de Mark Russell sobre la Nikola Badger salieron a la luz durante la noche del jueves. A la mañana de este viernes, las acciones de la compañía sufrieron un desplome importante. Solo tuvieron que pasar unas cuantas horas para que los títulos del fabricante norteamericano registraran una caída de aproximadamente 14%.
Se trata de un nuevo tropiezo después del paso sólido de Nikola en años pasados. No olvidemos que el pasado 8 de septiembre, la compañía anunció una asociación con el monstruo norteamericano, General Motors. El acuerdo de cooperación implicaba la fabricación de la Badger a cargo del grupo estadounidense, mientras que Nikola entregaría hasta 2,000 millones de dólares en acciones.
Las cosas comenzaron a tornarse más complicadas tras el escándalo que involucró a Trevor Milton. El entonces director ejecutivo renunció al puesto tras ser acusado de fraude, ya que habría lanzado numerosas mentiras a los socios para que firmaran acuerdos con base en falsa tecnología patentada.
Dicho escándalo ocasionó que el valor de la empresa cayera de forma estrepitosa hasta 36% en tan solo 3 días. Definitivamente, no corren buenos tiempos para una firma que parecía iniciar su camino en la era de la electrificación con el pie derecho.
¿Crees que Nikola pueda recuperarse de tremendos golpes en tan poco tiempo? Te leemos siempre en los comentarios.
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Referencias: arstechnica.com
