Te presentamos todo lo que debes saber sobre el bruxismo, un problema de salud que puede afectar tu calidad de vida.
El cuidado de nuestra salud dental va mucho más lejos de tener una bonita sonrisa, aseguran los especialistas. Lamentablemente, existen personas que no ponen demasiada atención en esta parte de su organismo hasta que aparece alguna molestia. En esta ocasión, vamos a hablar sobre una patología desconocida por la gran mayoría: el bruxismo.
Existen artículos de salud muy completos que exploran el tema con mayor profundidad, con la intención de que las personas sean conscientes de la necesidad de tratarlo con un especialista.
El bruxismo es un padecimiento que ocasiona que la persona apriete de manera inconsciente la mandíbula, llegando incluso a rechinar los dientes. Esto se realiza sin ninguna razón funcional u orgánica, además de que se puede presentar tanto durante el día como por la noche. Normalmente, el mayor desafío se encuentra en el bruxismo relacionado con el sueño, debido a que controlarlo es más complicado.
El primer paso es reconocer que el bruxismo es un problema de salud, por lo que será necesario llevar un tratamiento. Aunque no es considerado como grave, puede tener consecuencias que causen una mayor molestia en el paciente. Afortunadamente, un diagnóstico correcto conducirá a un tratamiento a medida con alto grado de efectividad.
Causas principales del bruxismo
De acuerdo con diferentes investigaciones y estudios, la aparición del bruxismo puede deberse a diferentes causas. Sin embargo, la gran mayoría de expertos apunta al estrés como una de las razones principales. Un estado continuo de preocupación o una vida demasiado agitada pueden desencadenar este hábito inconsciente.
De igual manera, existen otros factores que podrían derivar en dicha problemática. A continuación, te presentamos los que se suelen ver con mayor frecuencia:
- Trastornos de ansiedad: No saber manejar o reducir la ansiedad en nuestro día a día puede derivar en la reacción inconsciente de aumentar la tensión en la mandíbula.
- Problemas con la mordida: Una condición bucal que afecta la estructura de la mordida ocasiona un movimiento involuntario de los dientes.
- Sueño deficiente: Un trastorno de sueño también podría derivar en ejercer mayor presión en la mandíbula.
- Dolores en la zona del cráneo: Un malestar de cabeza o de oído genera una reacción adversa en el área bucal.
- Postura incorrecta: Algunos especialistas resaltan la importancia de tener una buena postura para no generar estrés corporal.
Síntomas del bruxismo
Los síntomas de este padecimiento suelen ser diferentes de una persona a otra. Sin embargo, la tensión excesiva de los músculos, tejidos y los diferentes elementos de la mandíbula tiene consecuencias que comienzan a afectar la calidad de vida. Una de las más comunes es presentar molestias en esta zona, pero también en la cabeza y el cuello.
En algunas ocasiones, la presión ejercida es tan intensa que también se puede experimentar dolor de oídos y rotura del esmalte de los dientes. Otra de las señales es que aumenta la sensibilidad muscular y dental, sobre todo, durante las mañanas. De igual manera, es posible que la tensión excesiva en esta parte de nuestro cuerpo nos provoque insomnio o un sueño de mala calidad.
Tratamiento
El tratamiento para el bruxismo varía dependiendo de la gravedad del problema. Sin embargo, el objetivo principal es reducir el dolor (si ya existe una molestia perceptible), evitar un desgaste pronunciado de la dentadura y un daño permanente en la mandíbula.
Para ello, se suelen emplear protectores dentales en lo que se adquieren nuevos hábitos, ya que por sí solos no resuelven la problemática. Un tratamiento efectivo puede incluir medidas como evitar alimentos con determinada consistencia, masajes ligeros en zonas afectadas, ajustar nuestros horarios de sueño, ortodoncia y ejercicios de relajación.
