Se festeja el 30 Aniversario del Lamborghini Diablo, uno de los superdeportivos más icónicos de todos los tiempos.
Todos han escuchado hablar del Lamborghini Diablo, sean apasionados o no del mundo del motor. Fácilmente, se ubica en el Top 10 de los superdeportivos más conocidos de todos los tiempos. Incluso aquellos que nacieron cuando ya no estaba en circulación, cuentan con alguna referencia sobre este biplaza que se fabricó entre los años 1990 y 2001. Es uno de esos modelos que fácilmente tienen un lugar asegurado en cualquier antología de los vehículos más icónicos de todos los tiempos.
Aunque vio la luz a principios de la década de los 90, Lamborghini comenzó a trabajar en él desde 5 años antes. La idea era que arribara al mercado como reemplazo del Countach, además de venir firmado en la línea de diseño por el no menos legendario Marcello Gandini. El mítico diseñador es responsable de otras grandes obras dentro de la industria, entre los que se encuentra el propio Countach, el Lamborghini Miura, el Lancia Stratos y el FIAT X1/9.
El gran debut del modelo ocurrió en el Salón del Automóvil de Ginebra 1990. Ese mismo año inició su comercialización a un precio de 212,000 euros. Como sabemos, su nombre recuerda al famoso toro lidiado en 1869 por el maestro José de Lara en la Plaza de las Ventas de Madrid.
La mecánica del Lamborghini Diablo
Este viernes, la marca de autos recordó la génesis del Lamborghini Diablo en el marco de su 30 Aniversario con este mensaje:
“30 años del Lamborghini Diablo, un superdeportivo que es tan reconocible que se convirtió en una leyenda instantánea. Algo que es y que siempre será”, escribió en su cuenta de Twitter, en un mensaje que acompañó con un par de fotografías.
Cabe recordar que el Lamborghini Diablo llegó al mercado equipado con un motor V12 de 5.7 litros que entregaba 485 caballos de fuerza y 427 lb-pie de torque. Este animal sobre ruedas era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 4.5 segundos, además de que podía alcanzar una velocidad máxima de 333 km/h. Esto fue suficiente para alzarse con el título del auto más rápido del mundo en su momento, un trono que arrebató al Ferrari F40 con sus 322 km/h.
Su influencia e impacto dentro de la industria del motor fue de tal magnitud que ha tenido aparición tanto en videojuegos como en el mundo del cine. No es difícil encontrarlo en las principales franquicias de juegos de carreras, tales como Need for Speed o Forza Horizon. Asimismo, se le considera como el modelo insignia de la compañía italiana, tal como sucede con el Ferrari F40 en el caso del fabricante de Maranello y el Porsche 911 de la marca alemana.
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