El mundo atraviesa por una emergencia climática; negarlo es algo irresponsable. Aunque cada vez existe mayor conciencia ambiental, todavía estamos muy lejos de hacer los cambios que se necesitan para construir una sociedad sustentable. Para aspirar a ello, las personas deben adquirir mayor responsabilidad sobre cada una de sus acciones. La verdadera transformación se encuentra en entender que cada decisión que tomamos en nuestra vida cotidiana tiene un impacto sobre el planeta.
En la actualidad, el mundo enfrenta una crisis de desechos. Solo debes mirar los contenedores de basura de tu hogar o salir a la calle para encontrar plástico por todas partes. La mayoría de las familias no se detienen a reflexionar sobre la cantidad de desechos que generan dentro y fuera de casa. Como consecuencia, tampoco buscamos maneras para reducir nuestros residuos. Además de contribuir al rescate del planeta, estaremos sembrando una semilla de cambio en los niños y adolescentes. Poner el ejemplo es crucial para ir forjando generaciones más educadas y responsables a nivel ambiental.
A continuación, te presentamos 5 cosas que puedes realizar para reducir de forma significativa la cantidad de basura que generas cada día.
5 maneras de generar menos basura
Usa empaques biodegradables
En los últimos años, la compra de productos online se incrementó de forma radical. El llamado e-commerce llegó para quedarse, ya que tiene muchas ventajas para el consumidor final. Sin embargo, no estamos viendo el panorama completo. ¿Qué pasa con todos los empaques que se utilizan para los pedidos de comida o las cajas donde llegó nuestro nuevo electrónico? Debido a las presiones regulatorias y leyes que exigen reducir el impacto ambiental, muchas empresas están usando empaques ecológicos.
En vez de desecharlos de manera inmediata, podríamos aprovechar las características de estos empaques reutilizables. La creatividad es el límite. Por ejemplo, úsalos como charola para macetas, para servir el alimento de tus perros o, incluso, para hacer algunas manualidades decorativas. Considera que esta clase de empaques están desarrollados con el único propósito de reducir la cantidad de desechos que se generan alrededor del mundo. Entre ellos, encontramos las cajas de cartón, pero también envases biodegradables para la venta y transporte de alimentos. Definitivamente, es una tendencia que tomó mucha fuerza en 2022.
Haz composta
En primera instancia, la idea de hacer composta en casa puede parecer compleja y desgastante. La realidad es que es más fácil de lo que parece, ya que el secreto se encuentra en implementar un sistema de clasificación efectivo. De acuerdo con diferentes estudios e investigaciones, una de las maneras más efectivas para reducir nuestros residuos sería usando los desechos orgánicos para “alimentar” a nuestro jardín trasero. Pocos saben que alrededor del 25% de su basura podría emplearse con este propósito.
Además de la reducción de los desechos orgánicos, el hábito de hacer composta permitirá reducir notablemente la dependencia de fertilizantes químicos. Estos últimos suelen tener un efecto secundario adverso a largo plazo, tanto en la contaminación del suelo como del aire. Es un hecho que el uso de composta mejora la estructura del suelo y le ayuda a una eficiente retención hídrica.
Utiliza bolsas reutilizables
Desde hace varios años, los supermercados y otros establecimientos dejaron de entregar productos en bolsas de plástico. Eso llevó a muchas personas a comprar bolsas biodegradables que admiten varios usos. Aunque parece algo menor, este cambio tiene un gran impacto porque los vertederos no se saturan de bolsas contaminantes. Lo peor que puedes hacer es apostar por los productos de un solo uso.
Todos sabemos que las bolsas y botellas de plástico, así como otros derivados del petróleo, son los mayores enemigos de nuestros suelos. Debido a su lento proceso de degradación, favorecen el efecto invernadero. Además, la descomposición de este tipo de productos libera al medio ambiente materiales tóxicos que afectan el aire que respiramos, al igual que la fauna y flora del planeta.
Reciclar y reutilizar
No, no son lo mismo. Aunque estos dos conceptos parecen ir de la mano, se refieren a procesos distintos. De cualquier forma, estamos ante maneras efectivas para reducir nuestros residuos. A diferencia de reutilizar, reciclar requiere que el material inicial se someta a un proceso o tratamiento que permita volver a fabricar el mismo producto o uno diferente. Normalmente, el reciclaje viene después del proceso de reutilizar, cuando hemos agotado los posibles usos de un producto.
Por ejemplo, es posible reutilizar el envase de vidrio de alguna botella de vino para hacer un florero. Sin embargo, si nuestro adorno se llega a quebrar, quedará prácticamente inhabilitado para darle otro uso. Allí es donde podemos separarlo de otros nuestros desechos para facilitar las tareas de reciclaje por parte de terceros.
Reparar, antes de desechar
En el ajetreo de la vida diaria, muchas personas prefieren tirar un producto con algún desperfecto y comprar uno nuevo. Sin embargo, la postura más responsable sería tratar de repararlo antes de lanzarlo al contenedor de basura. En ocasiones, te darás cuenta de que reparar algo es mucho más sencillo y económico.
Además, la ventaja es que actualmente encontramos tutoriales precisos en la web sobre como reparar una gran cantidad de cosas. El desconocimiento y la falta de interés nos llevará a deshacernos de muchos objetos que habrían podido durarnos varios años más. Considera comprar de forma paulatina diferentes herramientas que te permitan realizar varias tareas como la reparación de muebles.