Los arreglos florales son uno de los obsequios más comunes alrededor del mundo. Este detalle afectivo tiene lugar en varios países, además de ser una tradición a la que resulta imposible seguirle el rastro. Muchos esposos suelen sorprender a sus parejas con ramos de flores a domicilio para celebrar un aniversario, pero también las vemos en las camas de un hospital e, incluso, en eventos fúnebres. Entonces, ¿cuál es el verdadero significado de regalar flores?
Para llegar a una conclusión sólida, debemos revisar los orígenes de la tradición, algo que nos llevará de forma inevitable a encontrar diferencias entre culturas. Al final, todos coincidimos en que la acción de regalar flores está llena de simbolismos. Si bien el tipo de flor puede llevar una connotación determinada, también dependerá mucho de la situación y el momento en el que se realiza el obsequio.
Historia y tradición
Es imposible fijar una fecha precisa para el origen de la tradición de regalar flores. Sin embargo, existen registros históricos que demuestran que los seres humanos han realizado estos obsequios desde la antigüedad. ¿Cómo lo sabemos? Diversos estudios e investigaciones antropológicos encontraron restos de pétalos en numerosos cementerios que datan de la prehistoria.
Con el surgimiento de las primeras civilizaciones, las flores cobraron todavía mayor importancia como una manera de expresar ideas y sentimientos. Hallamos referencias a los ramos de flores en culturas como el antiguo Egipto, Grecia, Roma y China. En el caso de la popular mitología de los griegos, abundan los archivos que enlazan a determinadas especies de flores con las deidades. También las utilizaron con fines decorativos para ceremonias.
Durante la llamada Era Victoriana, la población desarrolló un gusto profundo por el cuidado de las flores y los trabajos de jardinería. Los integrantes de las clases altas las utilizaban para expresar sentimientos profundos, por lo que mostraron mayor interés por cultivar flores robustas y hermosas. La gente adinerada consideraba que enunciar los sentimientos era de mal gusto, por lo que utilizaron este recurso para comunicar sus emociones.
El simbolismo detrás de las flores
Como podemos darnos cuenta, la Era Victoriana reforzó el simbolismo detrás de esta clase de obsequios. Con el paso de los años, los diferentes tipos de flores representaban cosas distintas, una herencia que se mantiene hasta nuestros días. A continuación, te presentamos algunos ejemplos.
- Rosas: A pesar de que las rosas forman parte de las flores más regaladas, no todos saben que su significado depende del color. Por ejemplo, las rosas rojas aluden al amor y al erotismo, mientras que las blancas simbolizan inocencia y pureza. El color rosa refiere a un sentimiento de agradecimiento y confianza, pero las amarillas aluden a la amistad. Debido a que las rosas azules no son tan comunes, se usan para decirle a alguien que es verdaderamente excepcional.
- Peonías: Las peonías rosas se relacionan con la belleza, el amor a primera vista y la unión del matrimonio. Por su parte, las peonías de color blanco simbolizan timidez, el deseo del perdón y el arrepentimiento. De igual manera, las peonías rojas se vinculan con la prosperidad, el honor y el respeto, mientras que las azules son las del llamado amor eterno.
- Tulipanes: Regalar flores como los tulipanes tiene un significado especial. En general, son populares por simbolizar el amor perfecto, aunque los de color morado aluden a la realeza, los amarillos a la alegría y los blancos al perdón.
- Orquídeas: Otras flores que son muy apreciadas son las orquídeas debido a su carácter exótico. Son del agrado de gran parte del público femenino, debido a que son vistas como símbolo de belleza, elegancia, fortaleza, sofisticación y delicadeza.
¿Por qué regalamos flores?
Tras este pequeño ejercicio, podemos concluir que regalar flores tiene un significado que conduce de manera inequívoca a nuestra humanidad. Más allá de la situación, estos obsequios son populares porque permiten comunicar emociones de manera directa y sencilla.
Las flores se convirtieron en un código y lenguaje compartido, además de que se perciben como un regalo honesto y significativo. Como lo muestra la historia, están conectadas a la evolución de nuestra especie, la naturaleza humana y la necesidad de establecer conexiones íntimas.
De la misma forma, la mayoría de nosotros coincidimos en que las flores son el arreglo por excelencia. Nos gusta verlas en el centro de la mesa, el jardín y hasta en los recibidores de nuestra vivienda. Esta clase de adornos resultan inspiradores a primera vista, además de que influyen en la energía que se percibe en los diferentes espacios.
