La llegada de la era eléctrica, las nuevas tendencias comerciales y otra serie de factores obligan a los fabricantes a reestructurar sus catálogos. ¿La consigna? Dejar fuera a aquellos modelos que no están generando suficiente pasta; no importa si se tratan de modelos históricos. Esta semana, General Motors (GM) confirmó que la producción del Chevrolet Camaro llegará a su fin en 2024.
¡Tristeza total entre los amantes de los muscle cars! El Camaro es un modelo icónico que goza del favor de varios apasionados de la industria automotriz. De acuerdo con el vicepresidente de Chevrolet, Scott Bell, las últimas unidades de la generación actual del vehículo saldrán de las líneas de producción a principios del año entrante. La parte positiva de esto es que la empresa ve esta despedida como algo temporal, pues planean que el Camaro tenga un sucesor.
“Si bien no estamos anunciado un sucesor inmediato hoy, tenga la seguridad de que este no es el final de la historia del Camaro”, señaló el ejecutivo.
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Pero ¿qué es lo que ha pasado para que Chevrolet decida despedirse de un coche emblemático? Es evidente que el modelo tiene un enorme significado para la empresa, además de ser uno de sus productos con mayor identidad.
¿Por qué el Chevrolet Camaro dejará de producirse?
La razón es muy sencilla. La producción del Chevrolet Camaro llegará a su fin a inicios del año entrante debido a que las ventas se fueron al suelo. La debacle comercial del coche es notoria y, al mismo tiempo, alarmante. Hay que ver los números para entender por qué el vehículo, dejando emociones de lado, debe abandonar la alineación de Chevrolet en el mercado local e internacional.
En 2016, año en el que la compañía lanzó la sexta generación del coche, la empresa colocó en el mercado un total de 72,705 unidades. ¿Cómo se compara esa cifra con las de los años recientes? En 2021, la caída fue de alrededor del 70%, ya que la firma solo logró vender alrededor de 21,893 unidades. El año anterior, la cifra subió un poco hasta las 24,652 unidades, pero eso no es suficiente para sostenerlo en el portafolio.
El vocero de la empresa, Trevor Thompkins, dijo que Chevrolet tiene algunas cosas claras sobre el futuro del Chevrolet Camaro, pero todavía quedan asuntos que definir en los años venideros. Por ende, es imposible lanzar información sobre el sucesor o especular alrededor de una posible fecha de relanzamiento del muscle car. Claramente, hay otros temas y objetivos que deben atenderse primero rumbo a la era eléctrica.
¿Qué sabemos del sucesor del Chevrolet Camaro?
Si bien la empresa decidió guardarse cualquier información sobre el sucesor del Chevrolet Camaro, la directora asociada de S&P Global Mobility, Stephanie Brinley, trató de darnos la primera pista al respecto. Ante sus ojos, el muscle car cambiará por completo en su concepto histórico, pues se vería obligado a renunciar a los poderosos trenes motrices impulsados por gasolina.
“Sería poco probable ver otro vehículo eléctrico con motor de combustión interna”, advirtió.
No hay que ser un genio para saber que ese es el camino lógico para el Camaro, considerando que la industria automotriz se enfrenta a planes ambiciosos de electrificación. A veces, los fabricantes van impulsados por convicción propia, otra por un marco regulatorio que obliga a cambiar a la brevedad. Chevrolet tiene que ajustarse a la estrategia de General Motors, que tiene previsto vender únicamente autos eléctricos a nivel internacional para el año 2035.
En un sector que tiene como meta la sustentabilidad, los muscle cars no tienen cabida, al menos, no con su estructura y concepto actual. Si bien estos automóviles podrían conservar su estética vigorosa, los motores a gasolina deben ser reemplazados por trenes motrices eléctricos o impulsados por otro tipo de energía sustentable. Aplica para el Camaro y el resto de los modelos dentro de esta categoría.
Por ejemplo, Stellantis no producirá el Dodge Challenger con variantes de gasolina, además de que hay planes para estrenar un Charger impulsado por electricidad.
El legado del Chevrolet Camaro en la industria automotriz
El Chevrolet Camaro entra en la lista de los autos deportivos más icónicos de toda la historia de la industria automotriz. El modelo comenzó a rodar en la segunda mitad de la década de los 60, convirtiéndose en las décadas siguientes en un referente en materia de diseño, desempeño y tecnología. Además de ser uno de los muscle cars legendarios que exhiben parte de la cultura estadounidense, fue usado en competencias deportivas como NASCAR y Trans-Am.
Al igual que el Ford Mustang, el Chevrolet Camaro es un coche de culto, por lo que sus seguidores más leales están desconsolados por el final de su producción. Podría decirse que es el fin de una era. Este automóvil figura en numerosas colecciones famosas de autos clásicos, sumado a que la propia marca lo reconoce como un pilar fundamental para su consolidación de marca dentro del segmento de los autos deportivos.
La influencia cultural del Camaro va más allá de la industria automotriz. Por ejemplo, lo hemos visto como elemento protagonista en diversas películas; entre ellas, se encuentran Transformers y The Dukes of Hazzard. Asimismo, su nombre aparece en canciones y su figura atlética en diversos videojuegos.
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