¿Estás por comprar tus primeras gafas de sol y quieres saber cuáles te quedarán mejor? 

Entonces debes saber que identificar tus proporciones es esencial para encontrar el modelo perfecto. 

Si no tienes ni idea de cómo reconocer tu tipo de cara, en este artículo te ayudamos a saber cómo determinar este aspecto y te explicamos qué tipo de gafas se ajustan mejor en cada caso. 

Y una vez que encuentres el ejemplar perfecto para ti, te aconsejamos buscar el producto que tanto quieres en un outlet online, los cuales siempre cuentan con una amplia gama de productos de moda de todo tipo y están disponibles en aplicaciones para dispositivos móviles, para una mayor comodidad y rapidez.

Cara cuadrada 

Una cara cuadrada se caracteriza por contener una mandíbula fuerte y una frente ancha del mismo tamaño. 

Si este es tu caso, busca lentes de sol para hombre con marcos redondos, estrechos u ovalados con monturas más grandes que el ancho de tu rostro. Este diseño suavizará tus rasgos faciales y hará que tu semblante se vea menos angular.

Eso sí, evita los márgenes cuadrados o rectangulares, pues tu cabeza parecerá corta y las puntas se acentuarán. 

Cara redonda

Con los caballeros de cara redonda, la frente y la mandíbula son ligeramente más estrechos que la parte de los pómulos, sin que ninguno de los ángulos se marque, imitando de este modo a un círculo.

Para este patrón es bueno tomar alternativas con aristas pronunciadas, pero nunca patrones circulares. Por el contrario, las monturas cuadradas o rectangulares de líneas rectas crearán un perfil más definido y alargado, al facilitar líneas firmes. 

Ten en cuenta eludir de sobremanera las disposiciones redondas y los tamaños pequeños. Asimismo, busca lentes con un puente nasal más ancho, pues este accesorio dará estabilidad.

Cara ovalada 

En una cara ovalada la diferencia entre el largo y el ancho de los extremos tiene que sobrepasar los 5 cm. Además, la barbilla debe ser afilada (más estrecha que la frente) y la mandíbula escasa. 

Si tus medidas coinciden, tienes suerte, pues casi cualquier look te quedará bien.

Únicamente busca marcos que sean adecuados a tus medidas, no demasiado grandes ni demasiado pequeños. Un buen consejo es seleccionar los geométricos, rectangulares o ligeramente cuadrados.

Cara alargada o rectangular

Una cara alargada tiene apariencia de rectángulo, con una frente alta y una mandíbula estrecha que se encuentran a una distancia considerable una de la otra.

A este estilo le favorecen los armazones anchos que cubran la mayor parte del rostro, sin que sean muy alargados horizontalmente.

Las estructuras redondas o cuadradas también son una opción. Lo fundamental es priorizar el tamaño considerable, para así minimizar la sensación de anchura facial.

Forma de corazón o triangular

La cara de corazón se distingue por tener una frente y cejas anchas y una mandíbula estrecha y puntiaguda.

A esta conformación le van bien los marcos redondos u ovalados de tamaño mediano que no alcancen las mejillas y con monturas abiertas, que compensa lado a lado las características faciales. 

Pero evita escoger artículos toscos en la parte superior de la montura o con formatos redondos, pues atraerán la atención hacia la frente.

Forma de trapecio

En el extremo contrario, la configuración de trapecio destaca por una frente cuadrangular que se va ensanchando pronunciadamente hasta el final de la mandíbula.

Con esta fisiología, queda a la medida ponerse gafas ovaladas o estilo mariposa, que proveen volumen a los pómulos.

Cara grande

Ya que hablamos de tipos de rostros, pasemos a los tamaños. Respecto a la medida grande, las gafas ideales serán, precisamente, las de cristales grandes y montura fina o estrecha. 

Pensando siempre en la proporción, jamás uses lentes pequeños. Todo en armonía queda mejor.

Cara pequeña

Por su parte, las caras pequeñas requieren una consideración especial, pues los marcos pueden quedar demasiado grandes y abrumadores, lo que afecta negativamente la apariencia general. 

De esta manera, resulta esencial optar por alternativas acordes, con monturas estrechas y simples, pero gruesas. De lo que sí o sí se tiene que rehuir es de armazones demasiado grandes y pesados. 

En general, bastará con probar varios ejemplares y tamaños hasta encontrar los que queden mejor. 

Como sugerencia, una gafas de aviador, especialmente con marcos delgados y lentes no demasiado grandes, van de lujo.

El último consejo es que no solo el aspecto importa, pues, además, es crucial que revises el nivel de protección contra los rayos UV. Busca lentes con un recubrimiento de protección robusto y asegúrate de que sean de alta calidad y resistentes, tanto las micas como el material de la carcasa.