El Día de Muertos es una celebración que esperamos con emoción, nostalgia y alegría. Sentimos una cálida urgencia por salir a caminar bajo un cielo nublado, detenernos en la panadería de la esquina y echar a la bolsa nuestras un par de hojaldras azucaradas. Que nunca muera la tradición de visitar los hornos de pan para encontrar el sabor perfecto. Esta vez, queremos ir un poco más lejos y adentrarnos en la historia del Pan de Muerto.
La riqueza de la gastronomía mexicana ha llevado a muchas panaderías a probar recetas distintas. Incluso, las famosas hojaldras lucen diferentes dependiendo de cada región. Algunas de ellas están totalmente cubiertas de azúcar, otras tienen una apariencia más discreta y menos folclórica. Conocer la historia no solo nos ayuda a darnos una idea de los orígenes de la tradición, sino que también nos acerca a la receta original de este fiel acompañante de las tazas de chocolate y café.
Antes de profundizar en el origen y la historia del Pan de Muerto, hablemos un poco de la celebración. El Día de Muertos tiene como días más importantes el 1 y 2 de noviembre. Esta fiesta es una tradición ancestral para honrar la memoria de aquellos que ya no se encuentran con nosotros. La gente rinde tributo de distinta manera a sus seres queridos que han pasado a mejor vida. Lo hacen a través de ofrendas en sus viviendas o con visitas coloridas a los cementerios.
Así como el Pan de Muerto forma parte indispensable de la festividad, también lo son las calaveritas de azúcar y las flores de cempasúchil. El papel picado, las fotografías en blanco y negro matizadas por la luz de las veladoras, los platillos emblemáticos de la gastronomía nacional y las bebidas favoritas de los difuntos dejan estampa en nuestra mente. Sí, amamos el Día de Muertos por ser una tradición vida y colorida.
¿Qué es el Pan de Muerto?
Es un pan dulce tradicional mexicano que se elabora y consume específicamente durante los días previos y la celebración del Día de Muertos. Normalmente, su forma es circular y contiene varios elementos simbólicos alusivos a la vida y la muerte. Su sabor suele ser ligero, suave y dulce, con un toque de anís y naranja, además de presumir una consistencia esponjosa. Sin embargo, esto dependerá de la receta elegida.
Una pregunta frecuente es si el Pan de Muerto es lo mismo que las hojaldras. En muchas regiones, se usan estos nombres de manera indistinta, pero existen diferencias entre estos dos tipos de panes. El término de hojaldras es propio de regiones del país como Puebla y el centro de México. En estas zonas, hay variaciones del Pan de Muerto tanto en preparación como en forma. Su denominación deriva de la técnica tradicional de repostería, la cual se basa en la fabricación de la masa hojaldrada. Otros estados donde se usa el término hojaldras como símil de Pan de Muerto son Hidalgo y Tlaxcala.
Significado del Pan de Muerto
Mientras le das una mordida a tu Pan de Muerto, exploremos brevemente el significado de este alimento. Su elaboración y apariencia reflejan la unión entre dos mundos, el prehispánico y el español. Esto salta a la vista porque contiene la tradición de nuestros antepasados de festejar a la muerte, pero también incorpora el uso del trigo traído de Europa.
En lo que refiere al diseño redondo, es una representación del ciclo de la vida y la muerte. En la parte central, el pequeño círculo simboliza un cráneo, mientras que las cuatro canelillas que bajan por los costados aluden a los huesos. También representan las lágrimas que derraman las personas por los seres amados que ya no están en el mundo de los vivos. Esa división que apunta a los cuatro puntos cardinales es una alusión a cuatro dioses de las culturas prehispánicas, tales como Quetzalcóatl, Tláloc, Xipe Tútec y Tezcatlipoca.
El azúcar que va en la parte superior simboliza la dulzura del regalo llamado vida, así como el gozo de compartir el camino junto con los seres queridos. Vivos o muertos, el lazo auténtico con las personas amadas jamás se rompe ni deja de existir. Las esencias del azahar están asociadas al descanso eterno y la paz del espíritu.
Nosotros vemos el Pan de Muerto como un recordatorio constante de que nadie escapa del ciclo infinito de la vida y la muerte. Todo lo que nace, algún día debe morir. Los huesos que caen por diferentes lados de manera simétrica son un símbolo de la conexión que existe entre los mundos. Es una representación optimista que encaja perfectamente con el ambiente festivo, alegre y nostálgico de la celebración. La muerte no es algo triste, sino una etapa natural del camino por el que todos tendremos que pasar.
Historia del Pan de Muerto
El origen y la historia del Pan de Muerto nos remonta a la época antes de que llegaran los conquistadores españoles. En nuestro territorio, se preparaba la “papalotlaxcalli”, también conocido como pan de mariposa, un alimento exclusivo de esta ceremonia. ¿Cómo era? Consistía en una tortilla en la que la masa cruda llevaba impreso un sello con forma de mariposa.
El Pan de Muerto es insustituible en las ofrendas, como se les conoce a los altares que se ponen en honor a los difuntos. Los panes especiales de esta celebración llevaban, además de mariposas, otras figuras tales como rayos. Estaban preparados con ingredientes como amaranto y pan ázimo, el cual era un pan de maíz seco y tostado. El equivalente de lo que hoy conocemos como el Pan de Muerto sería el “huitlatamalli”, una especie de tamal.
Con la llegada de los españoles, este alimento incorporó otros ingredientes, especialmente, el trigo y el azúcar. Así fue como, a lo largo de los años se elaboró la receta básica de esta exquisitez tradicional que se incluye en las vistosas ofrendas y que abunda en las convivencias de las familias durante dicha temporada.
Los historiadores identifican el origen del Pan de muerto en los sacrificios humanos que se realizaban en la época precolombina. Sin embargo, la preparación que conocemos hoy en día tiene como base el platillo que adoptó las influencias españolas. Tras el rechazo y prohibición de las ceremonias sangrientas, los pobladores prepararon un pan de trigo con forma de corazón, el cual tenía encima una capa de azúcar pintada de color rojo. Dicha tonalidad representaba la sangre derramada de una doncella.
Diferentes recetas de Pan de Muerto
Receta del Pan de Muerto Tradicional
Como todos los platillos icónicos de la gastronomía mexicana, el Pan de muerto Historia ha derivado en distintas recetas. Pero ¿cuál es la forma tradicional de prepararlo? ¿Cuál es la receta que se apega más a los orígenes de este alimento?
De acuerdo con varios expertos en el tema, los ingredientes del Pan de Muerto tradicional son:
- Levadura
- Harina
- Agua tibia
- Sal
- Huevos
- Azúcar
- Mantequilla
Si quieres preparar Pan de Muerto para esta temporada, aquí te compartimos la forma más sencilla de hacerlo.
- Es hora de preparar el horno. Necesitas precalentarlo a 180º C.
- Mezcla 1 cucharada de levadura con ¼ de taza de agua tibia y 1 cucharada de azúcar. Es importante que te asegures de revolverlo bien para que no queden grumos. El objetivo es obtener una mezcla homogénea.
- De forma separada, realiza una mezcla con 4 tazas de harina, 1 cucharada de sal, 6 huevos y la mantequilla (debe estar derretida). Tras obtener la mezcla, agrega tu fórmula previa de levadura con azúcar.
- ¡Es hora de amasar con devoción! Cuando tengas una consistencia adecuada, deposita tu masa en un traste con tapa. Tendrás que esperar alrededor de una hora para que la masa aumente su volumen.
- Divide la masa en tres partes iguales y separa una de ellas, la cual utilizarás para la elaboración de los huesos que se observan en la superficie del Pan de Muerto. Usa dos tercios para hacer una bola.
- La masa reservada empléala para agregar los huesos y la encantadora bolita que siempre corona este tipo de pan.
- Usa el huevo restante para aplicar una capa superficial sobre la masa.
- Lleva tu preparación al horno precalentado y déjalo reposar durante un periodo de 40 minutos.
- Extrae el pan del horno y espolvorea sobre la cantidad de azúcar deseada.
- Regresa al horno la preparación durante otro lapso de 10 minutos.
- ¡El Pan de Muerto está listo!
Variantes de recetas de Pan de Muerto
Aunque siempre es bueno conocer la receta tradicional de platillos con tanta historia, no te prives de la oportunidad de degustar una variedad de recetas. Si eres “dulcero” por excelencia o fan de los postres, encontrarás muchas opciones allá afuera.
Por ejemplo, los panaderos y restaurantes juegan mucho con el relleno del Pan de Muerto Historia. Algunos suelen añadir chocolate y mermelada de fresa, pero también hay muchos lugares donde se venden con nata y hasta crema pastelera. La imaginación es el límite, lo que nos ha llevado a conocer Pan de Muerto con rellenos de cajeta, mazapán, Nutella y crema de rompope.
Asume que la variedad es un rasgo de la riqueza gastronómica del país. De acuerdo con diferentes investigaciones, se estima que hay más de 750 variaciones del Pan de Muerto dentro del territorio mexicano.
Consejos para disfrutar del Pan de Muerto
La temporada de Día de Muertos refleja la belleza de la cultura mexicana. Es una fiesta que, irónicamente, está llena de vida y alegría. A diferencia de los servicios y eventos fúnebres, se trata de una celebración que rebosa de energía hasta en los platillos y alimentos que descansan sobre nuestras mesas. A continuación, te damos una serie de consejos para disfrutar del Pan de Muerto, ya sea que seas mexicano o un turista que anhela vivir la experiencia al máximo durante su visita al país azteca.
- Antes de aventurarte a realizar o visitar cualquier lugar durante la temporada, te recomendamos aprovechar la oportunidad para aprender más sobre el Día de Muertos. Conocer el origen y la importancia cultural de los alimentos hará que tu experiencia sea memorable.
- No desperdicies la oportunidad de probar distintas variedades del Pan de Muerto. Inicia tu día con una pieza de pan elaborada con la receta tradicional, pero también date gusto con el pan que está relleno de nata, chocolate y hasta frutas.
- ¿Cuáles son las mejores bebidas para acompañar tu Pan de Muerto? El café nunca falla, sin embargo, creemos que la experiencia gastronómica tiene un encanto peculiar si lo combinas con una buena taza de chocolate caliente. Existen personas que, incluso, realizan un maridaje interesante con vino dulce.
- Preparar tu propio Pan de Muerto Historia puede volverse una tradición familiar hermosa. Experimenta con decoraciones y estimula la creatividad de los pequeños de la casa para crear decoraciones únicas. Por supuesto, adopta las medidas preventivas necesarias para que no haya accidentes en la cocina.
- Date una vuelta con el auto para descubrir panaderías locales. En la mayoría de ellas, encontrarás Pan de Muerto, lo que te servirá para conocer nuevos lugares y darte un festín de sabores con las diferentes preparaciones.
Por ahora, solo queremos desearte una feliz celebración con tus seres queridos. ¡Corre por tu Pan de Muerto y un chocolate caliente!
