Esta afirmación sobre la seguridad de un iPhone hay que tomarla con reservas, pero también como un factor a considerar a la hora de elegir nuestro próximo smartphone.
Android e iOS están destinados a una batalla encarnizada. Son los 2 sistemas operativos móviles por excelencia, ambos luchando por la supremacía. Dejando de lado sentimentalismos y fanatismos, toca ser objetivos sobre la seguridad de cada uno de ellos. Hasta hace pocos años, la situación era clara: un iPhone ofrecía mayor seguridad que un smartphone con el sistema operativo de Google. Sin embargo, todo ha cambiado.
De acuerdo con un experto en seguridad, ahora puede ser mucho más sencillo hackear un teléfono de la marca de la manzana que un dispositivo con Android.
¿A qué se debe este cambio?
De acuerdo con el detective Rex Kiser, los iPhone ofrecen un nivel adecuado de seguridad digital; pese a ello, están lejos de ser indescifrables. Hace un año, refirió, les era imposible hackear los teléfonos de Apple. En cambio, eran capaces de acceder a cualquier móvil con Android. Sin embargo, ahora se enfrentan a un escenario totalmente opuesto.
El experto explicó que hay smartphones con el SO de Google a los que resulta imposible acceder. En entrevista con Vice, señaló que no cuentan con ninguna herramienta que les brinde acceso a determinados smartphones Android. Agregó que a diario buscan vulnerabilidades, pero no han encontrado ningún hueco para penetrar sus sistemas de resguardo.
En cambio, estas mismas herramientas suelen entregar ciertos resultados en un iPhone. Por ejemplo, sirven para registrar las ubicaciones GPS, un registro de los mensajes, el historial de las llamadas, la lista de contactos y algunos datos sobre aplicaciones concretas (Instagram y Twitter).
Teléfonos como el Google Pixel 2 y el Samsung Galaxy S9 no arrojaron ni siquiera esta información. En tanto, el Huawei P20 Pro demostró el nivel de protección alcanzado por Android, ya que no se obtuvo ningún tipo de datos.
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¡Cuidado con el navegador del iPhone!
El especialista en seguridad dijo que basta observar la naturaleza de los navegadores móviles para entender la vulnerabilidad del iPhone. Android apuesta por Chrome como explorador web, el cual se analiza a detalle debido a su estructura de código abierto. En cambio, Safari tiene un desarrollo cerrado, lo que impide las colaboraciones para su fortalecimiento.
El resultado es un navegador que se presenta con una arquitectura débil, rezagada y con múltiples vulnerabilidades. Safari es descrito como una verdadera coladera, por lo que es fácilmente corruptible por los hackers.
Prueba de que es más difícil encontrar fallas de seguridad en Android es que se paga alrededor de 2.5 millones de dólares a quienes hallan algún “hueco”. En tanto, dar con un error de iOS se gratifica con 2 millones de dólares. Todo indica que la supremacía del iPhone en materia de seguridad llegó a su fin.
Referencias:
adsl.net
