Louis Camilleri, CEO de Ferrari, decidió abandonar la empresa de forma intempestiva; nadie esperaba la salida del director ejecutivo.

El CEO de Ferrari, Louis Camilleri, anunció esta semana su renuncia a la empresa. Su decisión sorprendió a todos, ya que ni siquiera en la compañía tuvieron tiempo para elegir a su sucesor. Cabe aclarar que se trata de una dimisión con efecto inmediato, por lo que abrió un periodo de inestabilidad en la firma de superdeportivos. Asimismo, su intempestiva renuncia causó bastante ruido en el sector.

Tras comunicar su decisión, el directivo no quiso entrar en detalles sobre los motivos que están detrás de una salida tan repentina. Claramente, sucedió algo que no esperaba o que le desagradó en su totalidad, aunque el tono amable en su mensaje posterior nos hace pensar que no hubo ningún desencuentro con la empresa.

“Ferrari ha sido parte de mi vida y servir como su director ejecutivo ha sido un privilegio (…) Mi admiración por los extraordinarios hombres y mujeres de Maranello y por la pasión y dedicación que aplican a todo lo que hacen, no conocen límites. Estoy orgulloso de los numerosos logros de la compañía desde 2018 y sé que los mejores años de Ferrari aún están por llegar”, declaró.

La transición en Ferrari

Tras darse a conocer la noticia, la compañía no tardó demasiado en nombrar al presidente John Elkmann como director ejecutivo interino. El empresario ejercerá el puesto hasta que se elija a quien tome el lugar de Louis Camilleri como CEO de Ferrari. De esta manera, se acaba el periodo de este último al frente de la marca, después de que asumiera el liderazgo en el verano de 2018. Ese año arribó a la firma tras el fallecimiento de Sergio Marchionne.

Después de recibir el nombramiento como CEO interino, Elkann dedicó unas palabras al saliente directivo. En su mensaje, reconoció el trabajo realizado por Camilleri y sus aportaciones para el crecimiento de la empresa.

“Me gustaría expresarle mi reconocimiento y más sincero agradecimiento a Louis Camilleri por su incansable dedicación como nuestro CEO de Ferrari desde 2018 y como miembro de nuestra Junta Directiva desde 2015 (…) Su pasión por Ferrari ha sido ilimitada y bajo su liderazgo la compañía ha reafirmado su posición como una de las empresas más grandes del mundo, capitalizando su herencia verdaderamente única (…) Le deseamos a él y a su familia una jubilación larga y feliz”, apuntó.

Durante su gestión, Ferrari vivió un periodo de constante crecimiento comercial dentro del sector de los superdeportivos de carretera. Esto es algo digno de admirar, ya que logró mantener un buen ritmo en el negocio pese al azote de la pandemia del coronavirus. Por ejemplo, logró que las acciones pasaran de 113 euros a 179 euros, una revalorización significativa.

Solo queda desearle suerte a Camilleri y, por supuesto, estaremos pendientes para saber por qué salió de esta forma de Ferrari. Definitivamente, no es algo normal ¡Hasta pronto!

Referencias: autosport.com