Los influencers de Noruega no estarán contentos con la leyes que están impulsando los legisladores de su país. La idea de estos últimos es restringir el uso del retoque digital en algunas de sus publicaciones, algo que podría impactar de lleno en sus campañas publicitarias. Por ende, sus ingresos se verán comprometidos y, claramente, eso no es de su agrado.
Los políticos noruegos en el aparato legislativo dieron luz verde a la enmienda de la llamada Ley de Marketing de 2009. Las modificaciones se enfocan en limitar los retoques digitales sobre contenido publicitario, una práctica bastante común entre los influencers. Recordemos que ellos trabajan de cerca con las marcas a través de patrocinios y publicidad pagada, algo que impide en muchas ocasiones que se emita una opinión objetiva y honesta sobre cierto producto o servicio.
De acuerdo con los legisladores de Noruega, los influencers están colaborando a fortalecer la presión corporal en la sociedad al compartir contenido dañino para la psicología de los usuarios. No se trata de una percepción, sino que se han realizado diferentes estudios que confirman la problemática. La investigación realizada por el Ministerio de Asuntos de la Infancia y la Familia de Noruega arrojó que se está asentando una cultura de inseguridad social en torno a los problemas de imagen y autoestima.
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¿Qué ley propone el gobierno de Noruega sobre los influencers?
Este organismo fue uno de los promotores más fuertes de la nueva normativa. A su parecer, la sociedad se encuentra cada vez más expuesta y vulnerable ante los miles de productos y servicios que promueven los influencers de Noruega. En su estrategia de promoción, se detectó que muchos de estos “personajes” recurren al retoque fotográfico y a la manipulación digital de las imágenes para alentar las compras.
La idea de las autoridades del país nórdico es que ninguna fotografía modificada digitalmente puede utilizarse para publicidad. Sin duda, esto representa todo un golpe para el sector, especialmente, porque las limitaciones serían muy estrictas. Por ejemplo, no se permitirá la realización de algún retoque, pero tampoco se podrán utilizar filtros o cualquier herramienta en general para aumentar su atractivo e motivar determinada conducta.
En caso de que sea necesario llevar a cabo un retoque digital, el influencer o la agencia publicitaria deberán aclararlo de forma explícita. Aparentemente, tendrán una etiqueta donde se informará a los potenciales compradores sobre la alteración de la imagen con fines promocionales. Claramente, se trata de un movimiento para atacar de frente la llamada publicidad engañosa.
Vale la pena resaltar que esta práctica es sumamente común cuando se promocionan artículos de belleza. Además de que se retocan elementos como las formas del cuerpo o la cara, el tamaño y la piel. De no tener ninguna etiqueta que aclare la edición, el influencer o la empresa se harán acreedores a una sanción económica.
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Un estudio alarmante sobre inseguridad social
El Ministerio de Asuntos de la Infancia y la Familia no quiso quedarse con los brazos cruzados, especialmente, después de enterarse de que más del 50% de las niñas de décimo grado en Oslo empezaron a tener problemas de salud mental. Sorpresivamente, se registraron casos de pequeñas que, “motivadas” por las publicaciones de sus ídolos en redes sociales, cayeron en padecimientos graves como la anorexia.
No estamos exagerando cuando decimos que se trata de una problemática grave. Por ejemplo, la anorexia golpea de forma brutal al país europeo, colocándose como la tercera causa de muerte más común en este rango de edades. El organismo gubernamental externó su preocupación por la actividad publicitaria de los influencers de Noruega, tras considerar que lo que menos les importa en este tipo de campañas publicitarias es el bienestar y la seguridad de los usuarios.
Frecuentemente, los influencers forman parte de campañas basadas en imágenes editadas que instalan ideales de belleza irreales. Si somos objetivos, este ha sido un mal que ha acompañado a la publicidad durante largo tiempo; la diferencia reside en que actualmente se generan volúmenes todavía más grandes de contenido publicitario engañoso debido a la participación masiva de los usuarios.
La propuesta de los legisladores dice lo siguiente:
“Los jóvenes están expuestos a una presión masiva para verse bien a través, entre otras cosas, de la publicidad y las redes sociales, y los modelos que se muestran a menudo se retocan de forma digital. Esto expone a los jóvenes a un ideal de belleza imposible de alcanzar”, se puede leer.
Hay que resaltar que la normativa se aplicará a todas las redes sociales, incluyendo el fenómeno de TikTok, Snapchat e Instagram.
¿Crees que será posible mantener a raya a los influencers de Noruega para impedir la generación de publicidad engañosa? ¡Te leemos siempre en los comentarios!
