Las marcas de autos se alistan para una competencia más intensa el próximo año. Algunos fabricantes renovarán su catálogo de forma importante, además de fortalecer su apuesta por la electrificación. En este grupo se encuentra Mazda, marca que pretende expandir su catálogo de SUV en Europa a partir de 2022. La compañía asiática tiene planeado el lanzamiento de un par de nuevos modelos.
Esta semana, la compañía informó sobre su objetivo de atender de mejor forma las demandas de los clientes. Sus análisis y estudios de mercado indican que existe una brecha que podría explotar para registrar una mayor cantidad de ventas en la región. La meta de la firma instalada en Hiroshima es que los clientes potenciales encuentren un amplio portafolio de SUV para satisfacer sus gustos y necesidades.
La empresa anunció que está lista para jugar con mayor rudeza dentro del mercado de las SUV, pero que una estrategia tan ambiciosa requiere de nuevos actores. Esta es la razón por la que veremos un par de nuevas camionetas que tendrán dimensiones superiores a la Mazda CX-5. Las nuevas opciones en el catálogo se sumarán a las CX-3 y CX-30, pero ahora tratando de complacer a quienes buscan camionetas familiares con mayor espacio al interior y mejores características para los viajes largos.
En el marco del anuncio, Mazda dio a conocer lo siguiente:
“[El próximo año, Mazda tratará de] dar respuesta a la creciente demanda del segmento SUV y ofrecer a sus clientes europeos una gama más amplia”, precisó.
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Las nuevas Mazda CX-60 y CX-80
Concretamente, Mazda ampliará su oferta de SUV en Europa con las nuevas CX-60 y CX-80, un par de camionetas de gran tamaño que se ubicarán en la parte alta de su portafolio. El primero de los nuevos modelos ofrecerá capacidad para 5 pasajeros, mientras que el segundo incluirá una tercera fila de asientos para albergar hasta a 7 ocupantes. Como podemos adivinar, todavía parece demasiado temprano para hablar de especificaciones o características definitivas.
Los rumores apuntan a que las nuevas SUV de Mazda en Europa tendrán un estilo parecido a la CX-30. Tiene total sentido que las camionetas presuman una silueta similar con una figura coupé, aunque este rasgo estaría más acentuado que en otros de sus modelos. En general, su diseño tendrá mucha coherencia con la filosofía actual de la compañía asiática, considerando que su apuesta en dicha área es una de las más sólidas del mercado.
Por ahora, no conocemos la gama completa de motores, pero la marca reveló información valiosa en este rubro. Tanto la CX-60 como la CX-80 estarán disponibles en versiones híbridas enchufables. De esta manera, podríamos elegir una mecánica basada en un motor 4 cilindros asistido por un propulsor eléctrico. Los clientes también las encontrarán con trenes motrices respaldados por tecnología de microhibridación de 48V, motores de gasolina y de diésel.
A la estrategia de estrenar un par de nuevas SUV, debemos sumar la próxima actualización de la Mazda CX-5. Tampoco podemos ignorar la expansión de la gama de la MX-30, la cual contará con una nueva versión que ofrecerá mayor autonomía. Esto último resulta interesante para quienes estén pensados en adquirir al primer modelo eléctrico de la firma japonesa.
Los planes de Mazda rumbo a 2025
Como podemos ver, se vienen grandes cambios en el catálogo de Mazda para el próximo año. Sin embargo, esto no se compara con lo que está a punto de suceder en 2025. La compañía prevé presentar una nueva plataforma orientada totalmente a la construcción de autos eléctricos. El nombre de dicha arquitectura será Skyactiv EV Scalable Architecture, la cual promete revolucionar el portafolio de forma radical.
La nueva plataforma de los japoneses se alinea con la hoja de ruta llamada Sustainable Zoom-Zoom 2030, año en el que se espera que todos sus modelos cuenten con opciones de electrificación. No es el plan más ambicioso en lo que respecta a la movilidad cero emisiones, pero es un gran paso para una compañía que no tiene demasiado recorrido en esta clase de propulsión.
En fechas anteriores, Mazda reveló sus pronósticos de ventas para ese mismo año. Si sus estimaciones son reales y su estrategia camina a la perfección, la cuarta parte de sus ventas provendrá de vehículos 100% eléctricos para 2030. Esto significó un giro total en su plan de acción para la presente década, ya que hace algunos años la empresa consideraba que el 95% de sus ingresos provendría de autos con mecánica híbrida.
Por ahora, Mazda se presenta como una de las marcas con planes de electrificación más mesurados, pero al menos se visualiza más realista que los objetivos fijados por otros actores en el mercado. La transición será mucho más paulatina con miras a conseguir la neutralidad total de carbono hasta el año 2050.
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