El enfoque alrededor del cannabis está cambiando en varias partes del mundo. Esto es más evidente en países como España, donde incluso está permitido el cultivo de plantas de CBD en casa. Es interesante atestiguar la configuración de un marco legal que permite esta clase de prácticas, siempre y cuando, se cumplan los lineamientos establecidos por las autoridades correspondientes.
El primer paso para entender los cambios en las regulaciones sobre el cannabis es diferenciar sus componentes. Mientras las restricciones continúan sobre el tetrahidrocannabidiol (THC), el panorama es diferente para el cannabidiol (CBD). Este último compuesto, normalmente extraído del cáñamo, está siendo utilizado como tratamiento natural para diversos padecimientos. Lo anterior ha sido posible debido a los beneficios documentados para atender dolor crónico, ansiedad, menopausia, síntomas de cáncer y cuadros de esclerosis múltiple.
El interés en el cultivo de plantas de CBD va en aumento. Los bancos de semillas como kalashnikov seeds han ganado popularidad debido a que son growers especializados. A continuación, te presentamos el proceso general del cultivo de cáñamo, una actividad que estará permitida o no dependiendo del país donde te encuentres y las regulaciones vigentes.
¿Qué es el cáñamo?
El cáñamo es una subespecie de la Cannabis sativa que contiene menos de 0.3% de THC. Además de las propiedades que permiten la fabricación de aceites, productos cosméticos, gotas, bebidas infusionadas y productos para vapeo, el cáñamo está vinculado a algunos beneficios ambientales como la mejora estructural del suelo, la protección de la tierra contra la erosión y la prevención de la deforestación.
El cultivo de cáñamo en interiores
Germinación de la semilla de cáñamo
El primer paso para el cultivo de CBD en interiores consiste en garantizar la correcta germinación. El proceso de plantación es similar al que se lleva a cabo con las plantas de tomate. Incluso, se deben generar condiciones parecidas para su desarrollo. Lo anterior implica remojar las semillas entre 8-12 horas, regular la temperatura entre los 18 y 21 grados centígrados y su plantación a 2.5 cm de profundidad. En este proceso, es necesario regular la temperatura del suelo y la humedad.
Cuidado de las plántulas de cáñamo
La protección de las plántulas de cáñamo implica mantener controlada la temperatura, la humedad relativa, la cantidad de luz y la fertilización. Por ejemplo, las plántulas que ya germinaron necesitan temperaturas que oscilen entre los 20 y 25 grados centígrados. El control de humedad debe ser estricto, con la intención de que se mueva dentro de un rango entre el 65% y 70%. Los expertos en la materia recomiendan usar luz LED de alto rendimiento varios centímetros por arriba de las plántulas, además de regular el periodo de exposición. Finalmente, el fertilizante utilizado debe tener una composición rica en nitrógeno.
Primer transplante
El siguiente proceso clave en el cultivo de plantas CBD es el trasplante. El primero de ellos se lleva a cabo cuando las plántulas ya han echado raíces al fondo y a cada lado del recipiente. Con la finalidad de completar esta etapa con éxito, es necesario utilizar una mezcla especial.
Segundo transplante
Cuando el nuevo recipiente queda pequeño, será necesario realizar el trasplante final a una maceta de mayor tamaño. En este caso, también es posible utilizar una bolsa de cultivo especial. Se recomienda utilizar una mezcla a base de composta con una consistencia más espesa.
Cuidado de plantas de cáñamo
En la fase final, es necesario supervisar que la temperatura esté en el nivel adecuado, una variable que dependerá de si se trata de cáñamo con o sin flores. Esto también definirá el rango de humedad relativa y la cantidad de iluminación. Mientras que las primeras no requieren demasiada agua cuando están floreciendo, las segundas necesitan que la zona de las raíces esté húmeda. De la misma forma, cada una de ellas demanda fertilizantes con una composición diferente para el crecimiento adecuado.