Dentro de las organizaciones, la alta dirección figura como la principal responsable de diseñar, revisar y mantener una política de calidad. Esta debe ajustarse a los objetivos y valores corporativos, siendo coherente con el propósito empresarial, el contexto de la organización y el marco normativo. Cuando las cosas son claras en este apartado, los empleados e integrantes de dicha organización entienden la forma en la que su trabajo afecta la calidad de producto y el éxito de la empresa.
Es importante que al implementar una política de calidad para ISO 9001, los directivos conozcan de manera clara y precisa los puntos más importantes de dicha normativa internacional. Recuerda que esta última se aplica a los sistemas de gestión de calidad de organizaciones públicas y privadas de cualquier tamaño. Asimismo, juega un papel crucial para lograr la mejora de la calidad de productos y servicios, a fin de garantizar la satisfacción del cliente.
Como podemos percatarnos, disponer de una política de calidad alineada a los estándares internacionales es crucial en muchos aspectos. No solo incide en la reputación de una organización, sino que también puede tener repercusiones en su actividad, financiamiento y operaciones diarias. Por ello, las empresas están interesadas en obtener la certificación ISO 9001, con la intención de ratificar que están interesadas en la mejora continua de sus productos y servicios.
¿Qué es la ISO 9001?
El primer paso para implementar una política de calidad para ISO 9001 es tener clara la definición y los objetivos de la normativa. En términos sencillos, podemos entenderla como un estándar internacional publicado por la ISO (International Organization for Standardization) que sirve como guía para el diseño, desarrollo y establecimiento de un Sistema de Gestión de Calidad.
Este último concepto, el cual suele abreviarse como SGC, está integrado por políticas, procesos y procedimientos documentados. Precisamente, aquí es donde entra la llamada política de calidad, la cual marcará la pauta en varios aspectos para establecer y hacer valer los objetivos organizacionales. La eficacia para alcanzar estas metas depende de la comprensión e involucramiento de los empleados sobre tales directrices.
Por otro lado, es importante que los directivos sean conscientes de los cambios que trajo consigo la era digital. Actualmente, las organizaciones pueden presentar su política en una auditoría ISO 9001 en diferentes formatos. No es necesario que la empresa la tenga redactada en un papel, sino que se puede mostrar en una página web, un video u otro soporte que permita exponerla con total claridad y precisión.
¿Qué es una política de calidad?
La política de calidad para ISO 9001 es un requisito dentro de cualquier SGC. Su principal propósito es establecer el marco donde se alinean objetivos, misión y la dirección estratégica. Además de encaminar a la organización hacia sus metas, también tiene el potencial de impulsar un cambio cultural entre los empleados y ratificar el compromiso de una empresa hacia los procesos de mejora continua.
Es importante comprender que una política de calidad entrega beneficios para la organización en todos los frentes. Para los clientes, se presenta como una declaración de intenciones que les permitirá confiar en que los productos y servicios cumplirán con sus especificaciones. En el caso de las autoridades regulatorias, la política de calidad para ISO 9001 significa que la empresa opera con los más altos estándares éticos y alineados a los requisitos reglamentarios aplicables.
¿Cuáles son los requisitos de una política de calidad para ISO 9001?
Entre los requisitos que debe cumplir, se encuentran los siguientes:
- Compromisos: La empresa debe establecer con claridad sus compromisos, como lo es cumplir con los requisitos correspondientes.
- Marco de referencia: Los objetivos deben alinearse con la actividad y marco empresarial, con la intención de alentar un funcionamiento correcto y coherente.
- Apropiada: No es correcto utilizar una política de calidad genérica, sino que debe ser enteramente personalizada para ajustarse a la actividad empresarial y el contexto.
- Actualizada: Debido a las condiciones, parámetros y circunstancias cambiantes, la política de calidad para ISO 9001 también debe actualizarse de manera periódica.
Para que una política de calidad sea efectiva y cumpla su propósito, este documento tiene que ser accesible a todos los públicos pertinentes. Por ello, la dirección debe girar la instrucción de colocarla al alcance de los empleados e integrantes de la organización. Esto puede significar su instalación en tablones de anuncios, salas de reuniones y, por supuesto, la página oficial de Internet.
De igual manera, los altos mandos podrían celebrar reuniones especiales para comentar los puntos y la visión organizacionales. Dada la importancia de superar las auditorías correspondientes, varias empresas se sirven de diversas herramientas para la implementación óptima y automatizada de la política de calidad en todos los niveles.