Los próximos años estarán marcados por los avances en inteligencia artificial. No es un tema a discusión. La efervescencia alrededor de las plataformas actuales como ChatGPT solo son el inicio de la “fiebre del oro”. Se trata de una tecnología que avanza a pasos agigantados y cuyos adelantos se presentan de forma exponencial. A la par, surgen un montón de preocupaciones y el debate se vuelve más intenso. Esta semana, el CEO de OpenAI, Sam Altman, trató de calmar las aguas asegurando que todavía no trabajan en GPT-5.
Pero ¿cuál es el motivo para detener el desarrollo o los trabajos sobre la siguiente actualización de GPT? Como podemos adivinar, algo tienen que ver las advertencias lanzadas por las autoridades gubernamentales y legislativas. Se suma la presión ejercida por los líderes informáticos que firmaron aquella carta que pedía frenar el desarrollo caótico de las herramientas de inteligencia artificial.
¿Qué es GPT-5 y por qué es importante?
Por ahora, asumimos que GPT-5 será el nombre de la próxima versión del modelo de lenguaje de OpenAI. Eso lo podemos dar por sentado debido a que el propio Sam Altman se refirió a ella con tal denominación. Como podemos anticipar, el objetivo es que supere en numerosas tareas y capacidades a GPT-4. De esta manera, podrá generar texto con mayor coherencia y realismo, partiendo prácticamente de cualquier tipo de entrada de información.
Aunque es probable que GPT-4 tenga pocos días en el mundo digital, la gente y los apasionados de la tecnología ya tienen la mira puesta en la siguiente versión. Algunos rumores aseguraban que GPT-5 completaría su fase de entrenamiento durante este año, por lo que podría llegar en solo algunos meses o, a más tardar, a principios de 2024. De forma concreta, el desarrollador Siqi Chen escribió en marzo pasado que el entrenamiento del modelo de lenguaje sería completado en diciembre.
Por supuesto, debemos tomar con pinzas las palabras de Siqi, sobre todo, cuando advierte sobre la capacidad de GPT-5 para lograr AGI. ¿Qué quiere decir esto? Se trata de un concepto que se traduce como Inteligencia Artificial General, el cual alude a la capacidad de AI para comprender y aprender cualquier actividad o tarea que los seres humanos pueden asimilar. Prácticamente, hablaríamos de un modelo de lenguaje multimodal que sería indistinguible de lo que generaría un ser humano.
La evolución de los modelos GPT de OpenAI
Los modelos GPT se basan en la arquitectura Transformer, los cuales se instalan como la principal revolución del campo de procesamiento del lenguaje natural (PLN) y la IA. En los últimos años, han logrado aumentar sus capacidades y la diversidad de datos con los que pueden trabajar. Por ejemplo, GPT-1 era capaz de ejecutar procesos con 117 millones de parámetros, mientras que GPT-4 trabaja con 175 mil millones de parámetros.
De esta forma, los modelos GPT pasaron de generar texto coherente a crear contenido que se acerca mucho más a la capacidad narrativa de un ser humano. Asimismo, han evolucionado de manera sustancial a la hora de abordar tareas como escribir código informático, la creación de arte y la interpretación de imágenes cómo si se tratara de texto.
Por supuesto, todavía enfrentan limitaciones y desafíos puntuales, pero los modelos GPT tienen un mundo de aplicaciones y terreno fértil por delante.
Las aplicaciones y los desafíos de GPT-5
Pese a que Sam Altman, CEO de OpenAI, aseguró que todavía no están trabajando en GPT-5, la comunidad de expertos advierte sobre los cambios que llegarán con dicha versión. Tras completar su entrenamiento en diciembre, podría superar el test de Turing. Como su nombre lo indica, consiste en una prueba desarrollada por el propio Alan Turing a mediados del siglo pasado. Consiste en una conversación entre una computadora y una persona que impide saber cuál de las dos partes es la máquina.
El experimento implica que un ser humano haga numerosas preguntas al chatbot y a un ser humano. Si al final es incapaz de identificar cuál de los dos individuos es la computadora, se podrá decir que superó con éxito el test de Turing. Pero, entonces, ¿cuáles serán las aplicaciones de GPT-5?
Aparentemente, veremos una integración mucho más sólida en actividades que implican la redacción creativa, la codificación informática, la creación de arte, la educación, la medicina, el entretenimiento y la asistencia personalizada.
Sobre los desafíos y limitaciones, GPT-5 no estará exento de generar respuestas sesgadas o inapropiadas. La falta de razonamiento y la comprensión textual compleja, así como la dependencia a los datos ingresados y los prompts de los usuarios, hará que no pueda tomar el lugar del ser humano en diversas actividades. Asimismo, habrá dificultades para evaluar su rendimiento.
Si GPT-4 abrió paso a una polémica y controversia a nivel mundial, GPT-5 seguirá planteando riesgos éticos y morales. Por ejemplo, los peligros son suplantación de identidad, difusión de información falsa y propaganda, creación de malware y códigos para ciberataques, y poca transparencia algorítmica.
¿Qué dijo Sam Altman sobre GPT-5?
La entrevista con CNET
En una entrevista con CNET, el CEO de OpenAI, Sam Altman, recalcó que todavía no trabajan en GPT-5 por varios motivos. En videollamada desde el MIT, desmintió uno de los párrafos de la famosa carta donde empresarios como Elon Musk piden pausar el desarrollo de los sistemas más potentes que GPT-4.
“Una versión anterior de la carta afirmaba que OpenAI entrenaba GPT-5. No lo estamos haciendo y no lo haremos por algún tiempo (…) Creo que moverse con precaución y aumentar el rigor para los problemas de seguridad es realmente importante (…) También estoy de acuerdo en que las barreras de seguridad tienen que fortalecerse ante el aumento de las capacidades de la inteligencia artificial”, señaló para el reconocido medio estadounidense.
Altman agregó que no se pueden enfocar todas las preocupaciones hacia la inteligencia artificial y los modelos de leguaje.
“Estamos como sociedad e industria haciendo otras cosas, además de GPT-4, que creo que tienen todo tipo de problemas de seguridad que también son importantes abordar y que están afuera totalmente de la carta”, sentenció.
Conclusión
Sam Altman confirmó que OpenAI no trabaja por el momento en GPT-5. Es un movimiento estratégico a sabiendas de que se vienen conflictos importantes que van más allá de una disputa con otros líderes empresariales.
Poco a poco, las autoridades de varios países empezaron a movilizar sus instrumentos legales y de regulación hacia las herramientas de inteligencia artificial.
En particular, destaca el caso de Italia y su bloqueo inmediato de ChatGPT. Asimismo, España abrió una investigación a OpenAI por preocupaciones en materia de privacidad. La Unión Europea y Estados Unidos no deberían tardar en tomar medidas más radicales sobre GPT-4 y otras plataformas que se están sirviendo del modelo de lenguaje.Si quieres estar al tanto de lo que ocurre con OpenAI y GPT-5, síguenos en redes sociales ¡Nos encuentras como Hiramnoriega.com!