El mercado latinoamericano del juego es atractivo para los operadores desde hace muchos años. Marcas populares están dispuestas a entrar en una región que tiene un gran potencial.
Sin embargo, debido al tamaño y la diversidad de la región, puede ser complicado incluso para una empresa establecida como Vulkan Vegas Casino expandir su negocio allí. Hay diferentes leyes y normativas que debes conocer primero. Veamos en detalle el marco legislativo de algunos países latinoamericanos.
Argentina
La regulación del juego en Argentina varía y depende de la provincia. En total, hay 23 provincias independientes y Buenos Aires, que es autónoma. En algunas se ha legalizado el juego en línea, por ejemplo en Buenos Aires. Sin embargo, el Congreso argentino es muy estricto con los operadores de todas las provincias y controla la normativa contra el blanqueo de capitales.
El panorama normativo y el proceso de obtención de licencias de iGaming varían de una provincia a otra. Todos los operadores deben controlar a los jugadores para evitar infracciones de la legislación contra el blanqueo de capitales y (en algunas jurisdicciones) garantizar que las transacciones de juego se realicen a través de bancos estatales.
Brasil
Brasil es el país más grande de América Latina, no solo en términos de población, su potencial de iGaming es increíble y el país tiene una gran oportunidad para seguir evolucionando.
No es de extrañar que los operadores europeos encuentren en él un mercado lucrativo y anticipen el establecimiento de regulaciones sólidas que les permitan conquistar posiciones y marcar tendencias. Brasil tiene el mayor porcentaje de usuarios de Internet del continente, Brasil es sin duda un objetivo fácil para los propietarios de casinos en línea.
Brasil ha mejorado drásticamente la situación del sector del iGaming, especialmente si consideramos las apuestas deportivas, ya que el nuevo Presidente Luiz Inácio Lula da Silva firmó el año pasado la importante Medida Provisional. Antes de esta decisión, se habían producido años de retrasos y debates, por lo que se trata de un momento histórico.
Colombia
Colombia es la primera y única jurisdicción latinoamericana con una regulación completa para las apuestas en línea, con deportes virtuales y casinos en vivo en línea. La primera licencia fue emitida en junio de 2017 por la autoridad colombiana de juegos de azar, Coljuegos.
Últimamente, muchos operadores de juego bien establecidos se han dirigido al mercado colombiano. Esta competencia complica el proceso para las pequeñas empresas, pero el éxito aún no es imposible, dado que cada vez más jurisdicciones de juego en línea de América Latina se plantean la legalización.
Chile
El futuro del juego en la nube regulado en Chile no está claro. Aunque la legislación, antes paralizada, está avanzando en el Congreso, la industria del juego tradicional ha interpuesto demandas contra socios de operadores del mercado gris, incluidos los poderosos equipos de fútbol profesional del país.
Si la regulación sale adelante en Chile, las plataformas estarán regidas por la Superintendencia de Casinos de Juego (SCJ) y los operadores deberán mantener las normas de seguridad exigidas para garantizar la seguridad del dinero en juego.
Perú
El caso de Perú es similar al de Chile: no existe una regulación formal. Sin embargo, el mercado peruano tiene una peculiaridad: las empresas de casinos en línea deben contar con un análisis bancario específico antes de poder ofrecer a sus usuarios el pago con tarjetas de crédito.
Uruguay
Uno de los países más pequeños pero más amigables con el juego en América Latina es Uruguay. La mayoría de los casinos y sectores del juego en este país han sido privatizados. Y cada provincia local puede tener sus propios límites oficiales. Pero, los casinos sin licencia o no reconocidos han sido estrictamente prohibidos en el país desde enero de 2018 por el presidente del país.
México
Si los operadores de juegos de azar quieren ser legales en México, necesitan obtener una licencia del regulador o, más comúnmente, asociarse con un titular de licencia existente. El Reglamento de la Ley Federal de Juegos y Sorteos instituyó un capítulo para los operadores que pueden obtener una licencia si demuestran experiencia, solvencia financiera y cumplen las normas legales y de gobernanza mexicanas.
Como en cualquier jurisdicción de Latinoamérica hay aspectos regulatorios que mejorar, pero en general, la industria mexicana del juego ofrece seguridad jurídica y está regulada para prevenir daños relacionados con el juego y proporcionar confianza a los inversores.