Muchas empresas trasladan su producción a China y otros países asiáticos por varias razones. La mano de obra barata es la principal. En esa lista aparece Apple, compañía que tiene una alianza comercial con uno de los gigantes tecnológicos de la región. Esta semana, el escenario se ha alborotado un poco con el estallido de protestas violentas en la principal fábrica de Foxconn donde se produce el iPhone. Tiene algo de ironía ver un producto premium vinculado a manifestaciones de trabajadores que exigen mejores salarios y condiciones laborales.
En la planta de Zhengzhou, ubicada en el centro de China, varios medios captaron las impactantes escenas de los trabajadores furiosos cargando contra la policía antidisturbios y funcionarios. De acuerdo con el diario The Wall Street Journal, las manifestaciones se desataron cuando los trabajadores se enteraron que el pago de las bonificaciones se retrasarían. A la par, aprovecharon la indignación para exigir mejores sueldos y reprochar algunas problemáticas ligadas con el confinamiento en el que se encuentran.
A través de redes sociales, circularon varios videos e imágenes donde se vislumbraba la tensión en la zona. Los ánimos están encendidos desde hace varias semanas debido a la inconformidad sobre las reglas estrictas impuestas por el gobierno contra el Covid-19. Asimismo, los empleados consideran que Foxconn no ha gestionado la situación de la mejor manera.
Frustración y resentimiento en China
Los trabajadores de Foxconn se encuentran en un bloqueo estricto por casos de Covid-19. El confinamiento se ha extendido durante semanas en lo que algunas personas conocen como la “iPhone City”. En el lugar, se estima que trabajan alrededor de 200,000 personas ligadas de forma directa a la producción masiva del teléfono de Apple. De acuerdo con varias fuentes, los empleados se encuentran aislados, siendo obligados a vivir y trabajar en el lugar para frenar los brotes en Zhengzhou.
La gente local o familiares de los trabajadores en cuarentena aseguran que Foxconn nunca ha tratado bien a su fuerza laboral. Algunos empleados realizaron transmisiones donde no solo dijeron protestar por los pagos retrasados, sino también por la escasez de alimentos. El sujeto mencionó que las autoridades los pusieron en confinamiento, pero sin proporcionarles alimento suficiente para el grupo. Como es costumbre, el férreo control sobre los medios digitales ocasionó que se bajara todo el material comprometedor en redes sociales como Weibo.
Por su parte, Foxconn aseguró que está trabajando con las autoridades y los empleados para evitar más protestas en la principal planta del iPhone. Asimismo, dijo que las acusaciones de incumplimiento en el calendario de pagos son totalmente falsas. De la misma manera, desmintió que hayan obligado a trabajadores sanos a compartir dormitorios con algunos de los colegas que arrojaron positivo en las pruebas de coronavirus. Finalmente, recalcó que la producción del iPhone no se vio afectada por las manifestaciones.
Aspectos clave sobre Foxconn y el iPhone
Producción del iPhone en riesgo
Debido a las protestas y las restricciones por Covid-19 en la fábrica del Foxconn, existe el riesgo de que la producción del iPhone caiga hasta un 30% durante el mes de noviembre. El plan original consistía en poder retomar el ritmo durante la segunda mitad del mes, pero el escenario se complicó con las protestas. Incluso, Apple llegó a decir que esperaba una caída en los envíos de los modelos más capaces de la gama del iPhone 14. La empresa afirma que trabaja para alcanzar la meta, pero esos objetivos ya lucen casi irrealizables.
Una fuente cercana a Foxconn y sus planes de trabajo aceptó que el escenario luce complejo. Las interrupciones provocadas por los disturbios habrían afectado a los trabajadores nuevos recién contratados. Debido a este escenario, lo más probable es que la fábrica no pueda retomar la producción para finales del penúltimo mes. Por obvias razones, esto afectará las ventas de la compañía, tomando en cuenta que Foxconn se encarga de aproximadamente el 70% de los envíos de iPhone.
Una fábrica aislada
En semanas pasadas, el férreo confinamiento en la planta de Foxconn motivó a algunos trabajadores a huir de las instalaciones. Para evitar esta situación, la administración instaló un sistema de circuito cerrado a finales de octubre. Dentro de la fábrica, los empleados del contratista de Apple trabajan prácticamente aislados del mundo. De acuerdo con extrabajadores de la compañía, miles de ellos habrían emprendido la huida del lugar pese a las dificultades.
Un grupo de protesta que se encuentra establecido en Hong Kong denominado China Labour Bulletin alzó la voz contra Foxconn. Un integrante de sus filas advirtió que el circuito cerrado impuesto por la empresa en la fábrica solo busca evitar que el Covid-19 se propague por la ciudad, pero sin importarle en absoluto las condiciones en las que se encuentran los trabajadores. Como suele ser costumbre, Apple no se pronunció sobre las protestas violentas en la principal fábrica del iPhone de Foxconn.
El nombre oficial de la empresa es Hon Hai Precision Industry Co., Ltd., pero es mejor conocida como Foxconn. Se trata de una multinacional taiwanesa con sede en el distrito de Tucheng, Nuevo Taipéi, la cual destaca por fabricar electrónicos por encargo. Vale la pena decir que es el mayor fabricante de componentes electrónicos a nivel internacional, además de ser el más grande exportador de China. Entre sus productos fabricados se encuentran el iPhone, el iPad, el Kindle y las cámaras GoPro.
¿Qué piensas de las protestas en la fábrica del iPhone propiedad de Foxconn? ¿Crees que hay violaciones de derechos humanos? ¡Gracias siempre por leer, comentar y compartir!
