Pese a la popularidad del comercio en línea, las tiendas físicas todavía forman parte clave de la estrategia de venta de las empresas. Sin embargo, cada vez resulta más desafiante obtener la atención de los clientes o compradores potenciales. Esta es la razón por la que decidimos profundizar en las diferentes técnicas de merchandising. Una de ellas consiste en saber cómo montar un escaparate visual para la exhibición atractiva de tus productos.
En un establecimiento, la comercialización visual debe ser coherente y apuntar hacia la misma dirección. La disposición estratégica de elementos, tal como la ubicación adecuada de un Expositor de bebidas resistente o de otro tipo, puede hacer la diferencia entre concretar una venta o no. Pese al cambio de tendencias en favor de lo digital, las empresas y negocios continúan apostando por el escaparatismo como la mejor estrategia para atraer a los clientes en sus espacios físicos.
En este artículo, vamos a explicarte por qué es importante saber cómo montar un escaparate visual, además de los beneficios de usarlo como una herramienta de marketing para alcanzar los objetivos.
¿Qué es el escaparatismo y por qué es importante?
La importancia del escaparatismo
El escaparatismo es una técnica del marketing visual que se lleva a cabo en el punto de venta. Se trata de una estrategia que se implementa en tiendas físicas y cuyo objetivo consiste en elevar la probabilidad de venta mediante la exhibición atractiva de los productos. La finalidad es que el aspecto llamativo del expositor para comercio con baldas o de otra categoría despierte el interés de los transeúntes.
De acuerdo con los expertos de marketing, los escaparates pueden ser una de las mejores herramientas para atracción de clientes. Pese a ello, todavía hay directivos que no les conceden importancia o que minimizan su impacto, lo que conlleva a dejar pasar una gran oportunidad para promocionar productos y, al mismo tiempo, reforzar la imagen corporativa de la marca.
El diseño y montaje de un escaparate requiere de varias consideraciones. Por ejemplo, es necesario visualizar el mejor aprovechamiento del espacio, la colocación de los diferentes elementos decorativos, la iluminación y la selección de los productos centrales. Sin importar la industria o el sector, el objetivo consiste en crear un escaparate visual que atraiga y retenga las miradas de las personas que pasen frente a él.
El escaparatismo como herramienta de marketing
La decisión de montar un escaparate visual exige contar con estructuras que permitan exhibir tus productos de manera óptima. Eso puede incluir desde expositores de botellas hasta maniquíes, fotografías o pantallas. Durante el proceso de diseño del escaparate, siempre ten presente que será el principal vehículo de comunicación entre el punto de venta y sus clientes, por lo que es vital reflejar el estilo de marca y presentar la propuesta de producto con solidez.
A través del escaparatismo, las empresas de cualquier tamaño tienen la posibilidad de enviar su mensaje a su público meta. Sin embargo, esta técnica de exposición se reduce a un breve espacio de tiempo, por lo que el desafío consiste en armar un mensaje efectivo. El diseño del espacio físico es el factor fundamental para aumentar su eficacia, por lo que los esfuerzos deben centrarse en mostrar la oferta de valor de forma atractiva, clara y precisa.
Cómo montar tu escaparate visual
Define el objetivo, temática y productos
El primer paso para montar un escaparate visual es pensar en este espacio como un embajador de tu marca. Es una ventana que abrirás a clientes potenciales y el público en general donde presentarás tus productos. Uno de los factores que condiciona el éxito de un escaparate es la capacidad de conectar con la gente a nivel emocional, por lo que te sugerimos escoger un tema que atraviese toda la exhibición.
Tu escaparate tiene que contar una historia con claridad. Un error frecuente de las tiendas es la falta de coherencia y la complejidad innecesaria, por lo que el mensaje visual nunca llega a la gente con sus intenciones originales. En esta etapa, tienes que tomar decisiones relacionadas con el color, el concepto, la iluminación, la música, la distribución de elementos y otros componentes del escaparate para que la historia vinculada a tus productos sea fácil de entender.
Cómo diseñar tu escaparate visual
El escaparatismo demanda jugar con la distribución de los elementos y analizar qué fórmula funciona mejor. Por ejemplo, si tu objetivo es que la gente vea un expositor de zapatos con los últimos modelos de temporada, debes entender que esto solo ocurrirá si guías su mirada de forma natural hasta ese sitio. Por ello, piensa en el punto focal de tu escaparate como el lugar donde tus clientes potenciales mirarán primero y se engancharán con tu historia.
Otro consejo es nunca olvidar que tus clientes buscan una solución a una problemática o una oferta de valor. El escaparate no puede ser espectacular y olvidarse de presentar productos relevantes para el cliente. Esta es la razón por la que debes plantearte la renovación constante de tus escaparates visuales, tratando de refinar el diseño y aumentar su alcance a través de una nueva distribución de elementos o el cambio constante de productos en exhibición.
Una recomendación es que trates de ser original a la hora de montar tu escaparate visual. Esto quiere decir que juegues con colores, texturas, alturas y profundidades. La capacidad de las personas para mantener su atención en un estímulo visual se ha reducido de forma drástica. Por ello, necesitas crear algo realmente único que los invite a pasar al interior e, incluso, preguntar por alguno de los productos del escaparate.
Cómo montar tu escaparate visual
Una vez que definas el diseño, la temática y tu punto focal, procede a montar tu escaparte visual respetando todas las medidas de seguridad. Elige solo las piezas clave de tu mercancía para la exhibición y colócalas dentro del contexto creado. Una sugerencia es que trates de no obstaculizar la visión hacia el interior de la tienda con el diseño del escaparate. Existen estudios e investigaciones de mercado que demuestran que ver personas al interior de un negocio atrae a más compradores potenciales.
Cuando estás montando un escaparate, es normal experimentar la sensación de querer colocar más productos de los necesarios. Sin embargo, te recomendamos no ver este lugar como un punto de venta directa, sino que su función consiste en atraer la atención, seducir de manera sutil a los clientes potenciales y llevarlos con naturalidad al interior de tu tienda física para obtener información detallada sobre tus distintos productos.
La elección de los productos que irán a exhibición en el escaparate visual debe estar asociada a los informes de ventas. La información oportuna es la clave para planificar cómo se deben mover tus productos dentro de los diferentes espacios de la tienda. Al final, recuerda que esta herramienta de merchandising visual pretende aumentar las ventas y agilizar el movimiento del inventario.
