A lo largo de la historia, el ser humano se ha enfrentado a fenómenos naturales capaces de devastar comunidades enteras. Entre los más temidos, se encuentran los huracanes, pese a que se presentan con regularidad en las zonas costeras. Sin embargo, no todos son iguales y algunos resultan terriblemente devastadores. Esta vez, vamos a explicarte qué es un huracán categoría 5 y por qué genera tanto temor entre los meteorólogos y la población en general.
En octubre de 2023, el paso de Otis por suelo mexicano trajo consigo horas de angustia, drama y luto. Acapulco, en el estado de Guerrero, sufrió el embate de una tormenta que evolucionó a huracán categoría 5 en pocas horas. Aunque en ocasiones es posible alertar con tiempo a la población sobre el poder destructivo de estos fenómenos naturales, existen casos donde todo pasa demasiado rápido.
¿Qué es la escala Saffir-Simpson y cómo se usa?
¿Qué es y cuáles son las categorías de la escala Saffir-Simpson?
La escala Saffir-Simpson se utiliza para clasificar los huracanes tomando como variable principal la fuerza de sus vientos. Por obvias razones, se entiende que, a mayor velocidad, el potencial destructivo del fenómeno natural es superior. Es importante aclarar que la escala toma como referencia la velocidad de viento máxima sostenida.
El nombre de la escala deriva de las personas que la desarrollaron a finales de la década de los 60. El ingeniero civil Herbert Saffir y el meteorólogo de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, Robert Simpson, fueron quienes crearon dicha escala para clasificar los huracanes. Solo dos años después, se empleó por primera vez y, desde entonces, se ha actualizado en varias ocasiones.
Si quieres saber qué es un huracán categoría 5, te dejamos la clasificación actual con su respectiva descripción:
- Categoría 1: La velocidad de los vientos oscila entre los 119 y 153 km/h. Este fenómeno producirá algunos daños tanto en construcciones como en árboles con raíces poco profundas. Es posible que los daños más extensos se presenten en las líneas eléctricas.
- Categoría 2: La velocidad de los vientos va de los 154 a los 177 km/h. En estos casos, se producirán grandes daños en construcciones de armazón, principalmente, en techos y revestimientos. Asimismo, se prevén cortes de energía que pueden prolongarse por varios días o semanas.
- Categoría 3: La velocidad de los vientos va de 178 a 208 km/h. Es garantía de un desastre natural severo, pues los daños en construcciones serán graves. Con frecuencia, son capaces de desprender las cubiertas de los techos. Además, muchos árboles serán arrancados de raíz y se producirán daños sobre vías carreteras. Durante varios días, podrían presentarse problemas en el suministro de luz eléctrica y agua.
- Categoría 4: La velocidad de los vientos oscila entre los 209 y los 251 km/h. Estos huracanes provocan una catástrofe y situación de emergencia. Casas que están bien construidas sufrirán daños graves como la pérdida de la mayor parte de la estructura. La región será inhabitable o enfrentará problemas para garantizar los servicios básicos durante varias semanas o meses.
- Categoría 5: La velocidad de los vientos rebasa los 252 km/h. Será una catástrofe en el que un alto porcentaje de las construcciones golpeadas presentará daños importantes. Habrá fallas totales y que pondrán en riesgo a la población incluso después de haber pasado el huracán. Se requerirá intervención intensiva de las organizaciones humanitarias, seguridad y rescate para el apoyo y búsqueda de personas.
El impacto económico de un huracán categoría 5 es grave, por lo que la población debe incurrir en gastos posteriores para tareas de reconstrucción o recuperación de sus negocios. Muchas personas se preguntan dónde puedo empeñar mi auto sin dejarlo para solucionar su urgencia de efectivo, al mismo tiempo que siguen ocupando el vehículo para sus traslados.
¿Qué factores se consideran para clasificar un huracán?
Existen diferentes factores que se toman en cuenta para la clasificación de los huracanes y su potencial destructivo. Entre ellos, se encuentra la velocidad del viento máxima sostenida, la cual se puede expresar en kilómetros por hora o millas por hora.
De igual manera, la escala Saffir-Simpson considera la altura de las olas, debido a que estas formaciones de agua pueden ocasionar daños importantes en las costas. La altura de las olas se expresa en metros o pies, dependiendo del país.
Finalmente, también se toma en cuenta la presión central, un concepto que se refiere a una medida de la intensidad del huracán. Este dato se describe en milibares.
¿Cómo se forma un huracán categoría 5?
¿Qué condiciones se necesitan para que se desarrolle un huracán categoría 5?
Es importante señalar que los huracanes categoría 5 son inusuales. Esto se debe a que se requieren una serie de condiciones específicas para que un huracán pueda evolucionar hasta la quinta categoría. La mayoría de ellos pierden fuerza antes de llegar a tierra. Sin embargo, cuando llegan a golpear las costas en su mayor fase destructiva ocasionan auténticas catástrofes.
De acuerdo con especialistas, un huracán categoría 5 está antecedido de una tormenta que debe alimentarse de aguas cálidas con temperaturas de al menos 26 grados Celsius. En su desarrollo, no debe encontrarse en ningún momento con mucho viento de nivel superior, ya que esto interrumpiría la rotación del huracán.
Asimismo, las tormentas más poderosas sufren un fenómeno conocido como ciclo de reemplazo de la pared del ojo. De acuerdo con National Geographic, esto ocurre cuando la pared del ojo, la cual contiene los vientos más fuertes, rodea el centro calmado de la tormenta. Si después de completar esa etapa, las aguas están calientes y la cizalladura (viento de nivel superior) todavía es baja, el huracán ganará intensidad.
Un huracán categoría 5 dejará daños severos en la zona, por lo que la prioridad es alertar a la población con el mayor tiempo posible de antelación. Tras el impacto, las pérdidas materiales y económicas serán significativas. Después de esta clase de fenómenos naturales, es frecuente que las personas busquen préstamos para lidiar con sus gastos urgentes como la reactivación de sus negocios. Si te preguntas cómo empeñar tu auto, nuestra recomendación es que analices bien tu situación financiera y capacidad de pago.
¿Qué etapas tiene el ciclo de vida de un huracán?
Ahora que sabes qué es un huracán categoría 5, te contamos cuáles son las diferentes etapas de su ciclo de vida.
- Formación: Durante esta fase, se desarrollan perturbaciones tropicales que alcanzan un sistema organizado denominado Depresión Tropical. En esta fase, la velocidad de los vientos no rebasa los 44 km/h y su tiempo de formación puede extenderse de 12 horas a varios días.
- Desarrollo: Ocurre cuando la Depresión Tropical se intensifica hasta alcanzar el grado de Tormenta Tropical. Se define como el sistema de isobaras cerradas con vientos que giran y convergen en sentido contrario a las manecillas del reloj.
- Madurez: En este punto, los vientos incrementan su velocidad superando los 120 km/h y alcanzando la categoría de huracán. A partir de allí, puede adquirir mayor fuerza o perderla de forma rápida, dependiendo de las condiciones existentes.
- Disipación: Esta etapa tiene lugar cuando la presión del centro del huracán comienza a aumentar y los vientos reducen su velocidad, los cual viene acompañado por el debilitamiento general del sistema.
¿Qué efectos tiene un huracán categoría 5 en el medio ambiente y la sociedad?
¿Qué impactos ambientales provoca un huracán categoría 5?
Debido a que la atención se centra en los daños en las costas y las poblaciones, muchas veces se pasa por alto el impacto de los huracanes en el medio ambiente. Un huracán categoría 5 provoca pérdidas importantes en el ecosistema.
Por ejemplo, los peces y la fauna marina mueren en cantidades importantes debidos a cambios en la salinidad del agua. Las inundaciones de agua dulce por lluvia y las marejadas ciclónicas atrapan a especies en agua con la salinidad inadecuada. Si esto ocurre de forma rápida, los animales marinos no tienen escapatoria. La muerte de especies también se presenta por varamientos por inundaciones, bajo nivel de oxígeno disuelto, rotación y largos periodos de días nublados.
De igual manera, los huracanes categoría 5 devastan áreas naturales terrestres. El impacto es mayor si destruyen centros de producción de energía y productos químicos, tales como gasolineras. En esta clase de fenómenos, suele haber una mayor liberación de productos químicos y contaminantes al medio ambiente.
¿Qué riesgos y daños causa un huracán categoría 5 a la población?
Un huracán categoría 5 causará devastación en las ciudades y poblaciones costeras. La catástrofe implica destrucción de edificios, caída de árboles y postes eléctricos, y otra clase de daños estructurales. Además, la marejada ciclónica deriva en inundaciones devastadoras, lo que también se traduce en pérdida de vidas y daños importantes en propiedades.
En los centros poblacionales, la tragedia no acaba con la disipación o el paso del huracán. Se suscitan daños en infraestructura, lo que a su vez interrumpe el acceso a servicios esenciales como electricidad, agua potable y las comunidades. Asimismo, miles de personas pierden sus hogares o deben abandonar sus casas por afectaciones estructurales severas.
A la par, las pérdidas económicas continúan durante varios meses o años, ya que un fenómeno de este tipo acaba con negocios completos. Las pequeñas empresas y negocios son las que enfrentan mayores dificultades debido a que no cuentan con recursos para costear las tareas de recuperación y reconstrucción. Existen casos donde una casa de empeño de autos es la alternativa más viable para obtener préstamos sin tener que dejar el automóvil, a fin de contar con dinero para los gastos imprevistos.
¿Qué ejemplos hay de huracanes categoría 5 en la historia reciente?
¿Qué huracanes categoría 5 han azotado el Atlántico en los últimos años?
Además de Otis, existen varios ejemplos de huracanes categoría 5 que se han formado en el Pacífico. En la década de los 90, tuvieron lugar los huracanes Emilia, Gilma, John, Guillermo y Linda, mientras que en la década de los 2000 ocurrió lo mismo con Elida, Hernán, Kenna, Ioke y Rick. La década anterior, esta región del mundo vio la formación de los huracanes Celia, Marie, Patricia, Lane, Walaka y Willa.
En el caso particular de Otis, el huracán llegó a registrar vientos sostenidos de 270 km/h. Se fortaleció porque se encontró en aguas oceánicas cálidas con temperaturas que rondaban los 31 grados Celsius.
En resumen, los huracanes de categoría 5 son fuerzas de la naturaleza devastadoras que pueden causar una amplia gama de riesgos y daños graves a la población que vive en zonas costeras. Para mitigar estos riesgos, es crucial que las comunidades en áreas vulnerables se preparen con anticipación, siguiendo las recomendaciones de evacuación, fortaleciendo las infraestructuras resistentes a tormentas y promoviendo la educación pública sobre la seguridad en huracanes.
Además, los gobiernos desempeñan un papel fundamental al establecer y hacer cumplir códigos de construcción, implementar sistemas de alerta temprana y coordinar respuestas de emergencia efectivas. El fortalecimiento de las medidas preventivas y la conciencia pública son esenciales para minimizar la pérdida de vidas y la destrucción material en caso de un huracán de categoría 5. La preparación y la prevención son la clave para reducir el impacto de estos poderosos eventos naturales.