La industria de la belleza mueve mucho dinero en Estados Unidos y el resto del mundo. Sin embargo, es importante que la gente se someta a tratamientos seguros ejecutados por profesionales. Esta semana, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) alertaron sobre los riesgos de infectarse de VIH al someterse a procedimientos que han ganado popularidad como los faciales de vampiro.

El escándalo estalló tras la publicación de un reporte el pasado 25 de abril. El documento vincula tres casos de mujeres contagiadas de VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana) que se realizaron faciales de vampiro. Las pacientes fueron atendidas en una clínica spa que no contaba con los permisos correctos en el estado de Nuevo México. Posteriormente, se descubrió que los contagios ocurrieron debido a que la sangre se contaminó durante el procedimiento.

Esto deja claro que el verdadero riesgo se encuentra en la negligencia por no realizar los protocolos sanitarios correspondientes. Así lo advierte el reporte, sin embargo, considera apropiado señalar de manera directa los nuevos riesgos tras los hallazgos encontrados al investigar esta clase de tratamientos innovadores.

“Aunque la transmisión de VIH debido a prácticas de inyecciones no esterilizadas es un riesgo conocido, determinar las nuevas rutas de transmisión entre personas que no tienen factores de riesgo es muy importante”.

¿En qué consisten los faciales de vampiro?

Los faciales de vampiro, o simplemente faciales vampiro, son procedimientos cosméticos basados en la aplicación de proteínas ricas en plasma. Consiste en la inyección del plasma sanguíneo en la piel del rostro, una tarea que se lleva a cabo con una especie de lápiz que tiene microagujas. Es importante aclarar que el plasma se obtiene de la propia sangre del paciente.

Entonces, ¿cómo es posible que se realice el contagio? Después de que se toma la muestra de sangre del paciente, una máquina especial se encarga de separarla en plaquetas y células. Sobre el papel, el tratamiento es completamente seguro, ya que no debería exponer al paciente a ninguna clase de contagio. El riesgo está en que se reutilicen puntas de microagujas o jeringas que no están esterilizadas.

La publicación de los CDC de Estados Unidos hizo mención directa de los casos de contagio en la clínica de Nuevo México.

“La investigación de múltiples infecciones por VIH entre personas sin factores de riesgo de VIH conocidos que recibieron plasma rico en plaquetas con microagujas (tratamientos faciales de vampiros) en un spa no autorizado de Nuevo México reveló una probable transmisión de VIH asociada con estos servicios de inyecciones cosméticas”.

Como era de esperarse, la clínica asociada a los faciales de vampiro que infectaron a tres pacientes cerró sus operaciones hace casi seis años. El spa tuvo que hacerlo tras una investigación sanitaria que encontró prácticas inseguras en esta clase de procedimientos. Hace un par de años, el propietario de la clínica se declaró culpable de cinco delitos graves por practicar la medicina sin licencia.

¿Cómo reducir los riesgos de sufrir una infección de VIH por un facial de vampiro?

Las personas que están interesadas en realizarse faciales de vampiros deben tomar precauciones para no infectarse de VIH. Esto es clave en cualquier tratamiento en el que haya manipulación o exposición sanguínea.

A continuación, te comparto algunas medidas que puedes tomar si estás evaluando la posibilidad de realizarte un tratamiento estético.

• Elige un proveedor de atención médica calificado
  • El primer paso es realizar una búsqueda meticulosa para encontrar una clínica segura y con buena reputación. Esto lo puedes hacer verificando la validez de la licencia, así como la trayectoria y las opiniones de clientes que se han practicado tratamientos faciales de vampiro.
  • No tengas pena o miedo de preguntar sobre la capacitación y la experiencia del proveedor de este servicio.
  • Date el tiempo de buscar si el proveedor o especialista está acreditado por alguna organización de renombre.
• Investiga sobre las prácticas de control de infecciones
  • Ningún especialista o clínica debe molestarse si le preguntas por su prácticas de control de infecciones. Básicamente, te deben comunicar con amabilidad las medidas que toman para prevenir la contaminación cruzada de equipos y suministros.
  • Si es posible, verifica que el proveedor utilice agujas y jeringas nuevas y estériles.
  • Observa si el proveedor utiliza guantes, bata y mascarilla durante el tratamiento.

¿Alguna vez has tenido una mala experiencia tras someterte a un tratamiento estético? ¡Te leemos en redes sociales y la zona de comentarios!